Odín y los Nueve Mundos

¡Ragnarok! ¡Guardare de los tres monstruos, porque traeran un horror atroz, la pérdida de toda esperanza! Los veras nacer sin poder hacer nada contra ellos, pues se alumbraran en tu propia casa. Por mucho que intentes doblegarlos, cuanto mas los hieras, mas daño te haras a ti mismo. Cosecharas la muerte del hijo y el tormento del hermano, y por esos crimenes de orgullo, fauces nafadas existiguiran el sol y la luna, y caera el invierno de inviernos y la guerra que diezmara el mundo sin respeto entre el hijo y el padre. Entonces te veras viejo y enfermo, y a merced de tus enemigos. ¡Guardate de los seres rabiosos a los que brutalmente has relegado, porque cuando llegue el dia en que te encuentres debil, todos tus terrores se uniran para atacarte al mismo tiempo! El hielo y el fuego se cerniran sobre ti y el aire temblara con el estruendo de la batalla. Sera el enfrentamiento final, un combate a muerte del que nadie podra escapar, y en medio de la batalla del fin del mundo veras a la cabeza de la huestes del caos a la peor de tus pesadillas, un coloso indestructible. 

Solo el saber de las tres tiene el poder de salvar la creacion.

Habia en el universo mucho mas de lo que veian los ojos, mucho mas que tierra y agua, que carne y sangre. Existian otros mundos, fuerzas poderosas en lucha, una potencia silenciosa que lo sostenia todo desde hacia un tiempo inmemorial. 

El fresno es fuerte, pero al mismo tiempo elastico. No se rompe facilmente. Las mejores astas de lanza estan hechas de madera de fresno. El olmo es elegante, se eleva muy recto y sus raices son tan fuertes y se hunden tan adentro que es dificil arrancarlas. No hay puntal mas resistente

Por el medio que fuese, costase lo que costase, todos los de su sangre acosarian a la casta de Odin hasta el fin de los tiempos 

Vuestros brazos no son tan poderosos, pero teneis otro tipo de poder, un poder que habreis de descubrir y aprender a dominar. Observad vuestro alrededor con mirada serena y actuad solo cuando sea necesario. Nada mejor puedo enseñaros. 

Formidables criaturas pueblan el mundo, sobradas de fuerza, brutales. Sin embargo, jamás consiguen el descanso, porque no saben contener su potencia y siempre buscan imponerse. 

Mucho es lo que ignoro y no me envanezco de ello. Por eso vengo a ti, a quien tengo por lo más sagrado de la creación , porque las hermanas eternas que tejen con tus hilos son mas poderosas y mas sabias que yo. Oye lo que vengo a decir: ya tiene el universo todas sus partes y cada cual está en su sitio; ya la vida florece en paz con mi protección ; sin embargo, todavía el fuego devastador arde en algún lugar impenetrable y el hielo eterno se acrecienta en algún extremo fuera de mi alcance. Siento la furia de los dos en mi interior, aletargada pero igual de destructora, a la espera de nuestra debilidad. Si la hueste de los míos ha de cargar con la tarea de contenerlos, es imprescindible que lo sepa todo sobre ellos. 

El fresno mantiene unidas las distintas partes del universo. Los nueve mundos crecen entre sus ramas, alrededor del tronco y en sus raíces. El los nutre y también los comunica. Es el garante del orden y la vida 

El arbol es todo y todo es el árbol