Segunda novela gráfica de la historia de esta adorable pareja y tengo que reconocer que me ha gustado más, si cabe, que la primera. Son una pareja muy adorable y bien avenida, con sus problemas conyugales que logran que el lector se vea reflejado en más de una viñeta y escenas dibujadas. Se lee en diez minutos o menos, es muy breve, y hace pasar un rato muy agradable con carcajadas y sonrisas incluidas. Ana Oncina lo ha vuelto a hacer, y es que es una novela gráfica maravillosa, perfecta para desconectar de todo y encima, viendo alguna de las viñetas, ayuda saber que hay situaciones que le ocurren a más gente y no eres un bicho raro. |