Emocionarte: La doble vida de los cuadros

Emocionarte es un libro sobre arte diferente y ahí radica, en mi opinión, su gran interés. Os cuento porqué: soy historiadora del arte, entonces, evidentemente me encanta el arte y es una de las cosas sobre las que más me gusta leer. No obstante, en general, los textos sobre arte son ensayos o complejos estudios que no consiguen despertar el interés del público general. Y es una auténtica pena.
 
Tenemos la suerte de vivir en un momento histórico donde el arte es para todos, y sin embargo, no sabemos valorarlo. Se que muchas personas pueden pensar que el arte es aburrido y que no lo entienden, pero hay que recordar que el arte no son años y nombres. No es necesario saber a que movimiento artístico pertenece una obra o saber qué rey aparece en ella para disfrutarla, la parte más importante del arte, son las emociones que nos despierta.
 
Por ello, la premisa de la que parte este libro me parece excepcional. Carlos del Amor ha seleccionado 40 obras y sobre cada una de ellas ha escrito dos textos. En el primero, plasma la historia que él se imagina al mirar el cuadro, simplemente deja volar su imaginación. En el segundo texto, encontramos datos verídicos sobre los artistas, curiosidades de su vida o de sus obras… es decir, un texto de arte puro. Eso si, enormemente divulgativo, entretenido y apasionante. En la lectura descubriremos qué artista se inicio a pintar después de caerse en una actuación como trapecista, qué obra aparece en La Sirenita de Disney y muchas otras cosas.
 
Entonces, si buscáis un texto erudito sobre historia del arte, no es vuestra obra. Si buscáis reencontraros con la pintura, darle una oportunidad a aprender algo de arte, conocer cuadros y sus historias… ¡¡no lo dudéis y haceros con este libro!! La selección de obras tiene un equilibrio perfecto entre obras archiconocidas y otras casi desconocidas de grandes autores.
 
Independientemente de si acabáis leyendo Emocionarte, os invito a que la próxima vez que vayáis a un museo os animéis a jugar a inventar las historias que hay detrás de cada cuadro, dejad volar vuestra imaginación, proponerlo a los más pequeños… ¡No puedo esperar a mi próxima visita al Museo del Prado!