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Empecé leyendo el libro sin mucho interés, pensando, por el título y la portada que sería la típica historia romántica de turno en la que o bien los protagonistas se quedan atrapados en una nave intentando sobrevivir con los pocos recursos de esta o si no el encontrar un planeta y a otros seres. Básicamente me engañaron, pero a mejor. La historia nos sitúa después de un ataque a una población minera d un planeta perdido de la mano de dios y no es a través de los ojos de una protagonista más aburrida que ver cómo respiran las ostras. Sino a través de diferentes cartas, documentos y transcripciones de lo ocurrido durante esos seis meses. Se nos envía la información poco a poco, al principio crees que será normal, como un cuaderno de bitácora, pero de repente todo da un giro de 360°. Se aleja de todo para mostrarnos una trama muchísimo más enrevesada de lo que podríamos esperar, suspense, terror, drama... ¡Todo en unas simples cartas e informes! Los personajes son muy humanos y donde más se muestra es en las conversaciones de chat típicas de gente de la edad. Tanto los principales que son adolescentes como los tenientes o coroneles tienen un lenguaje apropiado y son únicos cada uno a su manera. También me ha hecho gracia que en los usos de palabrotas tacharan gran mayoría de las palabras, irónicamente se sabe enseguida que juramento son cada vez. En conclusión, a pesar de su inicio un tanto lento, el libro contraataca enseguida con su rápido giro de los acontecimientos, que tiene bastantes y es lo que más te mantiene en vilo para seguir leyendo página tras página. |
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