En esta historia vamos a conocer a Megan, una chica buena, gentil y divertida que lleva años enamorada de Darren. Un nadador de lo más atractivo, tierno, divertido y... el mejor amigo de Megan. Se conocieron hace unos años en una fiesta, eran prácticamente niños pero se hicieron amigos al instante. Ya sintieron esa conexión. Desde entonces han tenido una relación de amistad envidiable pero ambos tenían sentimientos encerrados que no sabían que albergaban. Darren tendrá que irse a Londres a terminar su último año de instituto. Eso le sentará como una verdadera patada en el trasero a Megan. Aunque les costará mucho separarse el uno del otro durante diez meses y medio, lograrán despedirse con mucho esfuerzo, prometiéndose hablar lo máximo posible. Después de la partida de Darren, ambos empezarán a darse cuenta de lo mucho que se echan de menos y de lo mucho que se quieren, no precisamente como sólo a amigos. Aunque no se darán cuenta de lo que sienten rápidamente. En este libro veremos la evolución continua de los sentimientos de ambos protagonistas. Como pasan por todas las fases. Como se echarán de menos, como se necesitarán el uno al otro, como se querrán en silencio... Me ha gustado mucho este libro y quiero destacar varias cosas de él como que está escrito en tiempo presente, cosa que me encanta y me permite empatizar mucho más, y que al principio de cada capítulo, hay una breve cita de personas de renombre como escritores, cantantes, actores... y todas relacionadas con el capítulo en cuestión. También el que los personajes estén tan bien conseguidos, que tengan unas personalidades tan firmes y que no pierdan su esencia en ningún momento. Es una historia preciosa, tierna, rápida de leer y pegadiza. Una historia que nos muestra que no sabemos lo que tenemos (o sentimos, en este caso) hasta que lo perdemos. + Leer más |