Cuando tú ya no

En el poemario nos encontramos con el prologo, que está escrito por Marwan y el epílogo que está escrito por Rodolfo Serrano. Está formado por 97 poemas, divididos en cuatro partes. Todos ellos hablan sobre el desamor y la pérdida de aquello a lo que amamos.

Y es que guardo
en el pecho
corazón para ti,
para mí,
y para la realidad.

Algo que me ha gustado de los poemas es como la autora nos abre su corazón y expresa todos sus sentimientos sin ningún problema, por un momento llegué a pensar que estaba leyendo su diario.

No podría jurar
que me eran indiferentes,
pero al menos,
ya no me rasgaban la piel.

No soy una experta en poemas y por eso no puedo ser muy crítica con ellos, ya que cada poemario que leo me hace darme cuenta de que adoro la poesía y como los autores nos dejan una parte de ellos con cada una de las estrofas, es sorprendente.

Te quise,
porque parecías cerrar
las heridas que en realidad
solo tú abrías.

Casi al final de libro nos encontramos con: 20 Pensamientos de Amor y Un Último Poema. Son pequeños poemas que trasmiten el amor y el desamor, la necesidad y la ausencia. Es el último bocado que nos proporciona la autora para dejarnos una fantástica sensación tras acabar el poemario.

Lo más complicado
de todo esto,
no es echarte de menos.
sino echarme de menos,
a mí contigo.

Hay algunos poemas que son más largos y otros más cortos, pero sin darte cuenta te acabaras el libro en un suspiro. Creo que es una lectura genial para desconectar un poco y relajarte.

Una noche de lluvia torrencial vuelves en coche de ninguna parte y la emisora te apuñala con vuestra canción. Ese maldito tema que cantaste pegada a su espalda y bailaste entre sus brazos. La melodía que os acompañó mientras se encadenaban las risas, las caricias, las confesiones y las miradas. Aquellas miradas. de pronto se detiene la tormenta y un verano infinito invade el vehículo. Se suceden las instantáneas de vuestra felicidad. Avanzan, imparables, hasta arder en tu memoria. Fin del trayecto. Bienvenida al infierno.

La vida se deshace en versos entre las páginas de Cuando tú ya no, de Saray Alonso (2017, @muevetulengua_). Aquí cabe la nostalgia de la piel, de lo que perdimos y, quizá, también de lo que jamás tuvimos. Puede que los días pasados que nos supieran a gloria no fueran más que un poco de azúcar para que nos tratábamos la ponzoña que nos envenenaría el corazón. La tregua del encuentro con una misma y ese valor de mirarse al espejo. Y a ver qué hay. Un fogonazo de lo que amamos, de todo lo que entregamos y nuestras manos vacías, quizá esperando lo que nunca llegará. ¿Y si vuelve? Puede que lo mejor sea que no regrese. Pregúntale a Sabina. Él siempre dice la verdad.

Ponte el cinturón y arranca. Con este poemario corres el riesgo de saltarte todas las señales de exceso de velocidad. Porque Saray apunta segura, dispara sin inmutarse y te atraviesa hasta llegar a ese último dolor que creías dormido y que se despereza para recordarte que lo eterno sigue siendo inmortal.
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