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En torno a la frase de Albert Camus, “en medio del invierno aprendí por fin que había en mí un verano invencible”, gira el argumento de la nueva novela de Isabel Allende. Tenía muchas ganas de leerlo desde que salió y es que los libros de esta autora me suelen gustar mucho, no sólo por su narrativa sino también por los personajes que crea en todos sus relatos. Hace ya muchísimos años que leí La casa de los espíritus y aunque no tiene nada que ver con su nueva novela, es cierto que la forma en la que cuenta historias esta autora me sigue gustando mucho. Más allá del invierno es, sobre todo, un relato que denuncia el trato que reciben hoy en día los inmigrantes, en este caso en Estados Unidos. Ya vimos algún rasgo de este tipo en la autora con El amante japonés y su relato de cómo fueron tratados los japoneses en el país a raíz del ataque de Pearl Habour, pero ahora nos deja una denuncia más clara y actual sobre los latinos en el mismo país. Así nos expone no sólo cómo son tratados por las autoridades, sino cómo esto influye en todos los actos de su día a día. Lucía Maraz es la principal protagonista de este libro, una chilena que se ha divorciado hace poco y que acepta una oferta de trabajo en Nueva York para cambiar de aires. Allí es invitada por un compañero profesor al que ya conoce de alguna conferencia, Richard Bowmaster, quien también le cede su sótano como alojamiento durante su estancia en la ciudad. Ambos trabajan en la misma universidad y viven en el mismo bloque pero se mantienen muy alejados en sus vidas… Richard es un hombre muy metódico, reservado y que se mantiene alejado del contacto con las personas; mientras que Lucía es una mujer que se siente aún joven, extrovertida, con ganas de seguir disfrutando la vida y que se encuentra en la ciudad sola, acompañada sólo por su perro Marcelo. Las vidas de ambos se unirán de forma irremediable junto a la de Evelyn, una joven de Guatemala, tras un pequeño incidente de tráfico durante un temporal de nieve. Los destinos de los tres se cruzarán en una historia llena de sentimientos, en la que todos los personajes irán dándose a conocer poco a poco para que descubramos quiénes son en realidad y qué historia esconden detrás. Al igual que todas las novelas de la autora, es un libro tremendamente humano. En este caso, además, con unos personajes que descubren que la vida siempre te da segundas oportunidades para reencontrarse, ser feliz y no conformarse con lo que tenemos si no nos hace felices. Como bien apuntaba la frase sobre la que giraba el argumento, es un libro en el que sus personajes encuentran su verano, su felicidad, en medio de un horrible temporal de invierno… porque a veces las cosas suceden cuando menos lo esperamos. |
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