—Su padre pertenecía a la tribu de los hijos de la luna. Que sea Eva Luna entonces.
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—Su padre pertenecía a la tribu de los hijos de la luna. Que sea Eva Luna entonces.
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Su padre pertenecía a la tribu de los hijos de la luna. Que sea Eva Luna, entonces.
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"Su esposa era una criatura inferior, más cercana a los animales que al hombre, único ser inteligente de la Creación"
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Así está bien, pajarito, me animaba Elvira. Hay que dar bastante guerra. Con los perros rabiosos nadie se atreve, en cambio a los mansos los patean. Hay que pelear siempre. Fue el mejor consejo que he recibido en mi vida.
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-¿Te tocas el cuerpo con las manos? -Sí... -¿A menudo, hija? -Todos los días. -¡Todos los días! ¿Cuántos veces? -No llevo la cuenta... muchas veces... -¡Esa es una ofensa gravísima a los ojos de Dios! -No sabía, padre. ¿Y si me pongo guantes, también es pecado? -¡Guantes! ¡Pero qué dices, insensata! ¿Te burlas de mi? -No, no... murmuré aterrada, calculando que de todos modos sería bien difícil lavarme la cara, cepillarme los dientes o rascarme con guantes. |
La muerte no existe, hija. La gente sólo se muere cuando la olvidan, me explicó mi madre poco antes de partir. Si puedes recordarme, siempre estaré contigo.
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Las palabras son gratis, decía y se las apropiaba, todas eran suyas.
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No comprendía el propósito de embalsamarlos. Si eso fuera útil, la naturaleza lo habría previsto y no permitiría que los muertos se pudrieran, pensaba ella.
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Esa es la Santísima Virgen María -le explicaron. -¿Ella es Dios? -No, es la madre de Dios. -Sí, pero ¿quién manda más en el cielo, Dios o su mamá? |
¿En qué época está ambientada la obra?