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4/5 Después de mucho tiempo postergándolo, por fin ha caído este indispensable de la literatura queer actual, justo a tiempo para el estreno de su adaptación al cine. Las expectativas que tenía con este libro estaban por las nubes, todo el mundo parece adorarlo. Todos sabemos el mal que pueden hacer las expectativas y, aún así, he caído en la trampa. Lo primero que me chirrió fue el estilo de la narración. No se me ocurre mejor palabra para describirlo que deslabazado. Demasiado vulgar para mi gusto. Esta fue la principal causa de mi decepción. Otra cosa que no me terminó de convencer fue la resolución del mayor "misterio" del libro: ¿Quién es Blue, ese chico con el que Simon, nuestro protagonista, se manda emails durante toda la historia? Bueno, no es que fuese una resolución horrible, pero me esperaba algo más, otra vuelta de tuerca. Y quieras que no, al tratarse del misterio principal de la historia, me resultó una gran decepción. Aunque he de decir que al final de todo hasta me gustó la idea de que Blue fuese esa persona. Y para terminar con los puntos negativos solo me queda mencionar que no llegué a conectar con ninguno de los personajes. No es que estuviesen mal construidos ni que fuesen planos, pero me faltó un algo para llegar a encariñarme de ellos. Que sí, que Simon es un amor, pero ays, no me llegó tanto como me hubiese gustado. Por lo que dije hasta ahora parece que fue un libro que no disfruté y en realidad sí lo hice. A pesar de estos fallitos que comenté, que yo los atribuyo más a las altas expectativas que a que sean fallos en sí, es un libro que recomiendo. El tema queer está tratado estupendamente y con total naturalidad, como debería ser siempre. Es más, tiene frases y reflexiones sobre ese tema que no tienen desperdicio. Son ideas muy simples pero que parece que no todo el mundo comprende. Además es un libro muy gracioso y muy tierno, con poco drama. Se hace una lectura entretenida y ligera. Si sois queer os lo recomiendo todavía más, os vais a sentir muy identificados, los pensamientos de Simon son muy reales. Y si no lo sois, aunque no os sintáis tan identificados, va a ser una lectura muy tierna con la que seguramente os echéis unas risas. Y además estaréis contribuyendo a la visibilización de más libros queer, que hacen mucha falta. |
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