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Una relación del nuevo mundo, donde las redes sociales tienen TODO el poder; stalkeo, investigaciones dignas del FBI, un romance construído a través de las casualidades de la vida, con un pequeño empujoncito por parte de la fuerza de voluntad y la ilusión. Arthur y Ben se conocen por obra del destino, y atraviesan diferentes (e hilarantes) circunstancias antes de terminar juntos. El romance es adorable, y el lector puede sentir como el corazón se le acelera a medida que sus citas avanzan y la relación se torna ‘más seria'. ¿Cuál es el problema de esta pareja? La vida misma. Los silencios, la ansiedad, lo que se omite, la inseguridad, pero principalmente el tiempo; Arthur volverá a Georgia al terminar el verano y ellos sólo tienen una cantidad determinada de días para conocerse. Los personajes están muy bien construídos. Son jóvenes totalmente normales, con vidas comunes; punto a favor para que el lector pueda sentirse parte. La ambientación y las situaciones cotidianas ayudan a sumergirse de lleno en lo que se está leyendo. Cualquiera de nosotros podría ser Ben o Arthur, atravesar por malos entendidos, celos y problemas económicos. El realismo acrecenta la identificación y aligera la lectura. Disiento con la velocidad en que la relación avanzó, pero entiendo que se hubiese convertido en un libro INTERMINABLE si las cosas se daban de forma ‘normal'. Además, algunas de las situaciones conflictivas podrían haberse solucionado de forma más rápida y menos dramática. No pude empatizar con Ben. Cada cosa que hacía me caía mal, sorry not sorry. Creo que él jugó muy mal sus cartas en cuanto a la construcción de su relación con Arthur. Supongo que me recordó a alguien, y por ende no pude acercarme a él. Si bien tiene un momento de redención, no logré perdonarle sus errores. Dylan y Sam son lo mejor del libro, realmente me divertían sus intervenciones. Arthur es el cinnamon roll por el cual dejaría absolutamente todo para que pueda ser feliz; lo he adorado y he sufrido a su lado en todo el libro. Un muchachito inexperto, lleno de ansiedad y miedos. Me permito aplaudir su desarrollo como personaje, el hecho de haber luchado por lo que quería. ¿El final? No es lo que esperaba. Yo quería mi novela rosa con happy ending, y no es lo que tuve. Comprendo la necesidad de los autores de escribir un final que no fuera predecible, pero aún así creo que realmente era lo que necesitaba al leer un libro de éste estilo. El epílogo nos deja un mensaje muy claro: no todo termina como esperamos, pero éso puede abrir nuevas puertas. Hay que dejarse llevar por los impulsos y no vivir preguntándonos ¿qué hubiese pasado sí…? La vida siempre tendrá circunstancias tristes, nos impondrá desafíos que debemos superar para ser quienes deseamos ser; quedarse sentados junto a las dudas no nos hará avanzar. Una lectura ideal para un fin de semana de relax o para llevar de vacaciones. Me encanta que dos autores tan influyentes en el mundo de la literatura YA hayan colaborado en construir algo tan interesante. Ambos complementaron sus estilos de una forma muy armoniosa. Ojalá próximamente nos den un spin off o algo más, porque realmente me quedé dolida con el final. Enlace: http://situacioncaprichosa.w.. |
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