Despiértame para verte morir

Estamos ante un thriller narrado en primera persona con un comienzo de esos que enganchan. En las primeras páginas sabremos de unos perros que desentierran el cuerpo mutilado de Penny Lane de tan sólo ocho años. Richie Santoro acabará ejecutado por este horrible crimen mientras jura regresar para llevarse al abogado Marcus Crane al mismísimo infierno.

¿Cuánto poder tienen las palabras? ¿Hasta dónde puede llegar una obsesión?

Nuestro autor desea que vivamos ese asesinato llevándonos no solo a la muerte de la niña sino antes de que eso sucediera. Vamos a ver sus últimos momentos como espectadores atados de manos con las bocas amordazadas sin hacer nada más que verla morir. Han pasado los años ya no ejerce la abogacía podremos llegar a entender el precio que se paga en salud mental el involucrarse como persona y no como abogado en un caso tan dramático.

Ahora es alguien completamente atormentado, depresivo. No importa el paso del tiempo, con un libro que escribió recordando lo que vivió, lo que perdió en el camino la audiencia televisiva sube, el morbo regresa, el monstruo muerto vuelve a ser noticia. ¿Puede la miseria los malos tratos convertir a alguien asesino? ¿Fue Richie Santoro un criminal creado por la sociedad? Una pregunta que los psicólogos todavía no han sabido responder.

En el aniversario han comenzado unos nuevos crímenes, las personas más cercanas de Marcus están siendo asesinadas pero lo más sobrenatural de todo eso, es que él los ve morir entre imágenes y pesadillas. También ve al asesino, pero ese murió hace años en la silla eléctrica. El miedo es poderoso y una entidad por sí mismo. Es lo suficientemente real. Creemos lo que la mente quiere que creamos. Miguel Aguerralde lo sabe. Nos dejó una increíble historia donde los personajes actúan por sí mismos. Pesadillas terroríficas con tintes sobrenaturales. Televisores que parecen malditos encendiéndose solos mostrando asesinatos.

Una historia sangrienta de un asesino sin compasión. Un autor que tiene capacidad de sobra para narrar y darle al lector entretenimiento. No es sencillo crear algo ficticio, saber que lo que lees no es real, sentir el escalofrió del miedo.

Y es que el sueño es una aventura segura. En cierto nivel, el durmiente lo asimila. Lo que muchos no entendieron es que es el despertar lo que trae las pesadillas. Una maldición puede tener la suficiente fuerza para mover el mundo sobrenatural, pero también puede dejar alojada una semilla en el real.

Un buen libro, sí, lo recomiendo.

Estamos ante una novela muy intensa, que te mantiene en tensión desde la primera página y que logra mantener al lector enganchado en todo momento. Despiértame para verte morir es una historia adictiva, que se lee del tirón, gracias al ritmo ágil con el que el autor ha sabido dotar a la trama, y también gracias a estilo de narración tan visual y cinematográfico como el que tiene esta novela, que ya es marca de la casa en la mayoría de las obras de Miguel Aguerralde.


El autor ha sabido crear una historia que bebe mucho de la novela negra (género donde se mueve como pez en el agua), pero también ha sabido integrar en la trama elementos del thriller y unas cuantas pinceladas de terror. Todo ello mezclado da como resultado algo como esta obra, que hace que sus poco más de 250 páginas supongan para el lector toda una experiencia plagada de acción, tensión, de momentos muy impactantes, donde al autor no le tiembla el pulso a la hora de contar, con todo lujo de detalles, los horribles crímenes que se irán sucediendo a lo largo de la novela, en especial a partir de la segunda mitad de la historia.

Los personajes están bien desarrollados y perfilados, desde el principal, Marcus Crane hasta los secundarios. Todos y cada uno de ellos tienen entidad y personalidad propias.

Aunque la historia que se cuenta en Despiértame para verte morir no es la más original del mundo, cosa harto difícil ya que todo (o casi todo) está inventado, el autor sabe dotarle con la suficiente personalidad y de su estilo propio, para salir muy bien parado. Aguerralde sabe apropiarse muy bien de los elementos clásicos de la novela negra para crear una trama que no te deja soltar en ningún momento el libro hasta acabarlo. Y solo me queda hablar del desenlace, un final que siendo sincero, me ha encantado, me ha dejado muy buen sabor de boca y está a la altura del resto de la novela. Demostrando que no hace falta ser el más innovador ni inventar la pólvora para hacer que el lector queda atrapado y se sumerja en las páginas de Despiértame para verte morir. Estamos ante una lectura adictiva, llena de grandes momentos, que hacen que esta novela no tenga que envidiar para nada a los títulos que nos llegan de autores internacionales.

En definitiva, esta obra es absolutamente recomendable para todos los amantes de la novela negra, y para todo aquel que disfrute de las buenas historias. Entretenida en todo momento. Otra prueba del buen hacer de Miguel Aguerralde, un autor que es siempre garantía de calidad, como demuestra su amplia trayectoria, con un buen puñado de novelas y de relatos en su haber.

Es una muy buena historia relatada en primera persona. En apenas 250 páginas cabe mucho más de lo que nos imaginamos. Nos encontramos frente a un caso entre muy escabroso y muchísimo. Durante la presentación de éste, sentí escalofríos y asco, mucho asco. Una vez presentado ya estás enganchado a la trama y no quieres soltarlo. El autor juega con el lector hasta el final, casi literalmente. Puede que imagines, puede que creas pero probablemente no sea nada de lo que piensas. Está muy bien construido y es muy ligero de leer. Lo he devorado en nada. A medida que iba avanzando la trama, se iba complicando más y más en lugar de ir poco a poco desvelándote cuestiones que te ayuden a atar cabos. Juega con tu mente y con la de los propios personajes hasta que dudas hasta de tu sombra. Me ha encantado está lectura. En cuanto vi el título, supe que era para mí y desde luego, no me he equivocado. En lo que tampoco me he equivocado ha sido en conocer la forma de narrar de Miguel Aguerralde, ha sido una experiencia que sin duda voy a querer repetir. Si te gustan las historias algo sádicas, esta historia es para ti. ¿Te llama la atención? ¡Dale una oportunidad! Y si se la das, ¡no olvides contármelo!

El autor, nos aprisiona en una historia, tan… ¿macabra tal vez? Según quien lo lea, pero a la vez tan adictiva que sientes que si no la terminas y descubres todo, ni tu mism@s podrás dormir en paz.

Es la primera novela que leo de él y ME ENCANTO, su manera de contar las cosas, como desarrolla los personajes, los sucesos, la trama, el misterio, el terror que le implementa al libro me enamoro completamente.

Siempre los libros de misterio, suspenso y esas cosas han sido mi mayor debilidad, y al ver Despiértamente Para Verte Morir, supe que sería un libro el cual no dejaría ni a medias, ni me aburriría jamás, y me alegro de haber acertado en eso.

Este libro con sus 188 páginas nos cuenta como un asesino fue sentenciado por un crimen cometido a una niña de 8 años.

Marcus, el abogado que lo sentencio, luego de haber ganado se retira de la abogacía, refugiándose en su casa, tras las causas tan traumante que le dejó el caso Santoro, durante dos años ha vivido pesadillas, alucinaciones y un miedo que lo ha hecho alejarse de todo. Siempre recordando las últimas palabras que dijo Santoro cuando lo vio vivo.

Justo en los días que se celebra la muerte de la ejecución de Santoro, Marcus comienza a tener alucinaciones tan grandes que cree enloquecer, no sabe y tú como lector creo que tampoco que es real o no. Lo cierto es que una noche lluviosa después de año nuevo, comienza el carrusel de muerte que llevara a Marcus a la locura… si es que ya no estaba en ella.

Marcus presencia de la manera más extraña masacre porque esas muertes no tienen otra descripción tras masacre, observando a través de un televisor como Santoro con su cuchillo, —como si fuera la mismísima parca—, acaba con ellos. Esas partes me hacía acordar la película Juegos del Miedo xDD o ¿es Juegos Macabros? :/

Después de la muerte de Tom, Charlie y Crystal, Danny uno de los amigos de Marcus descubre algo que al leerlo piensas,… wow… hemos dado con el asesino, y pensamos que no habrá regresado desde el infierno, pero sí que Santoro es el que está cometiendo todos esos asesinatos.

Como bien leemos, todos, pero todos los amigos de Marcus, mueren de una manera horripilante, de la misma manera en que murió esa niña de 8 años. Eso es lo lleva a pensar a Marcus que El Chino (Santoro) ó está vivo, o cumplió su promesa y regreso desde el infierno para acabar con él. Hay puntos claves a lo largo de la historia que nos ayudara a pensar en varios candidatos, pero el final nos revelara que ninguno de ellos, era quien pensábamos… o tal vez sí.

A medida que iba leyendo, me iba interesando más y más como persona curiosa que soy, el querer saber lo que estaba pasando me estaba carcomiendo. El asesinato, la ejecución, la visiones de Marcus, el bendito televisor, los gritos, las risas, cada una de esas cosas fueron las que mantuvieron las ganas en mi de llegar hasta el final.

Ya que menciono el final, la verdad no me decepciono, pero también me dejo como un poco enredada, confusa, tuve que releerme los últimos 6 párrafos para convencerme y decir, Si Yolit, él es el culpable de todos, está completamente loco, no cambies de opinión, es él, es él, es él, es él, es él… Ok, la verdad es que estoy por escribirle a Miguel Aguerralde y decirle que me explique ese final xD O sea, será o no será… o.O

Quisiera poder decir otras cosas más sobre lo que me ha parecido la historia, pero no podría escribir ni un párrafo más sin contar el final y arruinarles el libro para quienes aun no han leído.

Solo les diré que tras la muerte de Charlie, recordé una frase que leí al comienzo del libro, en la nota de autor, y que con ayuda a la portada y sinopsis, me termino de convencer de leérmelo.

Enlace: https://carosbookreviews.blo..

Creo que hasta hoy, no había leído ningún libro de novela negra. Sí que había leído libros de thiller pero nada en comparación con este tema y me ha sorprendido gratamente.

Pocas han sido las veces que tras estar leyendo un libro haya notado que los pelos se me hayan puesto de punta. He notado por primera vez ese escalofrío que recorre tu cuerpo tras sentir miedo, y en este caso no a través de una película con imágenes de miedo, sino con un texto sobre miedo que ha conseguido transmitirme esa cosilla por el cuerpo.

Esa cosilla ha sido la que ha despertado en mi que me haya leído el libro en poco tiempo preguntándome todo el rato qué es lo que realmente está pasando y quién es el autor de los asesinatos si se supone que el verdadero asesino ha sido condenado a la silla eléctrica y está ya bajo tierra.

No es un libro muy extenso y entre el tema que lleva y la distribución de los capítulos, hace que sea una lectura muy amena a la vez que cautivadora y con mucha incertidumbre.

Me ha gustado y mucho, he de reconocerlo. ¡Me ha sorprendido gratamente! Aun tratándose de un tema tan fuerte, me ha gustado.