Segunda parte, y última, de esta bilogía que comienza con “Y entonces llegó mi ángel”.
En esta ocasión la novela comienza donde terminó, con Ainoa embarazada del difunto Adrián y teniendo que asumir todos los cambios físicos y hormonales que esto conlleva, así como la tristeza de la pérdida de su gran amor. Aunque no estará sola, contará con la ayuda incondicional de sus amigas ibicencas, las cuales la arroparan desde el principio sin conocerla en profundidad, simplemente del trabajo.
Esto nos lleva a pensar que las amistades, al igual que el amor, más fuertes nacen en las circunstancias menos favorables y que hacen que podamos considerarlas como esa parte de la familia que nosotros elegimos. Y aunque Ainoa es tentada en varias ocasiones por otros hombres, entre ellos el hermano de su difunto novio, su amor incondicional por Adrián la hará permanecer fiel, como se dice hasta la eternidad, a él aunque le cueste la cordura.
Por otro lado estará presente Pablo, su amigo gay y exnovio de Ainoa, que representará su vida anterior en su Málaga natal, y que es otro pilar fundamental para la obra al demostrar que por encima de todo siempre tiene que quedar la amistad. Además su personaje nos lleva a plantearnos las dudas que muchas personas tienen en referencia a su identidad sexual, ya que él vuelve a sentir que le atraen las mujeres, aunque no por ello se las tiene que menospreciar, o infravalorar o peor aún acosarlas y discriminarlas por razón de sus gustos y condición sexuales.
También, tenemos a los padres de Adrián que ofrecerán todo su apoyo a Ainoa, dando lugar a que nos demos cuenta que aunque no haya ningún tipo de papel firmado, las parejas de los hijos/as deben ser consideradas como miembros de la familia siempre que se sepa que era una relación consolidada, y no andar pleiteando ya que de esta manera no se respeta los deseos del fallecido/a.
Con un final bastante impactante.

Me paso hoy por aqui para hablaros de “Mi ángel nunca se fue” de Dori Salmeron y editado por @ediciones_arcanas a quienes agradezco el envío del ejemplar. Se trata de la segunda parte de “Y entonces llegó mi ángel”, que leí en diciembre y cuyo final me dejó 😱😱.

En esta segunda parte vemos a una Ainoa triste pero que intenta superar lo que le ha pasado saliendo adelante, mientras va apoyándose en la gente que le rodea y que, en tan poco tiempo, se han ganado su corazón convirtiéndose en su familia. Vuelve a ver a esos amigos que dejó en Málaga y que siempre han estado presentes en su vida, a pesar de que tendrá un encontronazo con Pablo, su ex. Y tiene mucha más relación con la familia de Adrián. Con todos estos personajes ayudándola a salir adelante, ella rehará su vida, seguirá saliendo con sus amigas, se reconciliará con Valeria, y seguirá sintiendo y escuchando a Adrián, a pesar de que dejará de decirlo en voz alta por miedo a que la tachen de loca.

Es inevitable hablar mucho de este volumen sin hacer spoiler de la primera parte, asi que solo diré que la historia en sí me ha gustado y la manera de escribir de la autora también, pero creo que al final todo ocurre muy rápido y me hubiera gustado un final un poco más desarrollado. Algo tenía detrás de la oreja con ese final porque creo que el título en si ya es un spoiler.

Yo siempre he pensado que la fortaleza de las personas esta dentro de nosotros, en nuestra esencia y en nuestra alma.
Hoy quiero traer esta reseña porque el título lo dice todo con esta historia, siempre cualquier persona que se va nunca se va del todo, queda en los corazones y recuerdos de muchas personas.
Este libro cortito que es la segunda parte de y entonces llegó mi Ángel es una entrañable historia de un amor, no voy a contar spoilers pero es súper bonita y entrañable esta historia, sabía que me enseñaría muchas cosas.
La gran pega es que podrían haberla hecho en un solo libro.
Pero recomiendo esta bilogia para que lean en mi resumen las diferentes etapas de un amor verdadero.

En el final de la primera parte a la protagonista se puede decir que le sucede algo terrible, pero por otro lado, algo bueno. La parte mala que le toca vivir la deja devastada, y así es como enlaza con esta segunda parte.

Para mi este libro ha sido igual de entretenido que el primero, pero en este la autora le ha dado un punto de misterio hasta el final del libro, aunque yo desde principios ya me olía que podía estar sucediendo.

El final se me ha hecho muy corto y, a mí, me hubiese gustado que explicara algunas cosas que se puede sobreentender pero yo lo prefiero escrito tal cual.

Suceden varios acontecimientos que le dan vida a los personajes y hace que disfrutes con esos sentimientos y, como ya os dije en el anterior, sigo pensando lo mismo en este, es un libro que te entretiene, además es muy cortito,de fácil lectura y hace que despejes la mente.

Y por supuesto decir, que yo quiero más y espero que la autora haga tercera parte ;)
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