Llámame por tu nombre

La verdad es que me pasó como a la gran mayoría: no había oído hablar de este libro hasta que faltaba poco para que saliera la película, y por ello decidí esperar y leer el libro antes de verla. Os adelanto algo: me gustó más la peli que el libro, no me matéis. al leer tan buenas críticas lo leí con las expectativas por las nubes, aunque no tenía mucha de idea de lo que me iba a encontrar.

Elio y su familia acogen a un chico o chica joven y culto cada verano en su casa, y este año toca a Oliver, por quien Elio siente una gran atracción desde el primer momento.

No sé qué esperaba encontrar porque no quise saber mucho sobre qué iba, lo único que me importaba era que estaba recibiendo muy buenas críticas y debía ser por alguna razón. Quizá me esperaba una historia de amor más bonita, más romántica... Pero me he encontrado a un Elio obsesionado y a un Oliver mucho más frío de lo que creía.

Mi principal problema ha sido el protagonista, que tenía una actitud enfermiza y no me explicaba como la gente podía romantizarlo. Lo que siente no es amor, es atracción y obsesión. Todo su mundo gira alrededor de Oliver, todo y apenas lo conoce. A cada mínimo gesto que hace se monta una historia o una paranoia, lo analiza todo. La narración de Aciman es así durante todo el libro, y aunque me ha parecido original y curiosa, ha hecho que el libro se me hiciera cuesta arriba, sobre todo por los pensamientos del protagonista. [...]
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