Me gustaría dividir este libro en cuatro partes y juzgar las cuatro de manera independiente. Con esto solo pretendo ser lo más justo posible con lo que me he encontrado y he sentido al leerlo. Estas cuatro partes son: Contenido, introducción y notas, ilustraciones y edición. Bien. Empecemos por la edición, magnífica de Nórdicalibros en una tapa dura muy cómoda de leer, papel de alto gramaje y en semi-color. de sobresaliente. El contenido, como no podía ser menos, maravilloso. Antonio Machado es Antonio Machado, y refrescar algunos de sus poemas siempre es estimulante, sobre todo si vienen acompañados (y vamos a por el tercer elemento) de unas acuarelas exquisitas y divinas de Leticia Ruifernández. Y no son cuatro o cinco ilustraciones, no. Alrededor de 40 acuarelas preciosas que acompañarán al lector por todos los escenarios desde los cuales Machado se inspiró para escribir sus poemas. Resulta una pena que todo el trabajo realizado quede enturbiado por el cuarto elemento, que es el tono utilizado por el prologuista y conductor del libro, A. R. Almodóvar, con el que me he sentido "violado" desde la página 1, en la que básicamente viene a decirte que los poemas significan tal o cual cosa, y sobre todo tal o cual cosa con significación politizada (muy progresista y de izquierdas todo). Pues no, caballero. La literatura, y en particular la poesía, pudo escribirse con una intención, pero en el momento en el que un autor deja sus escritos para que los lean otros, estos cobran vida propia e interactúan con las vivencias y con las inquietudes de los lectores. Es la magia de la literatura, y has intentado robármela en el prólogo. Además, afirma en este prólogo que "al bueno de don Antonio, ahora que se han liberado sus derechos de autor, le esperan muy variados acomodados, cada cual tirando de él para su causa" "Hasta el estupor y la indignación hemos oído citar los célebres versos 'caminante no hay camino...' en las más diversas proclamas y por los más variopintos personajes, desde presidentes del gobierno conservadores hasta líderes de sectas religiosas". A mi juicio se comienza criticando justo lo que se va a hacer durante todo el libro: llevarse la obra de Machado al terreno político y siempre con una perspectiva, algo que afea el producto. Porque hablar de protofeminismo en el poema de las rejas de hierro me parece simplemente afear lo bello. Tampoco me parece de recibo ese final en el que afirma que Machado y su madre reposan en el cementerio de Colliure, donde permanentemente reciben el homenaje de DEMÓCRATAS de todo el mundo. Vamos, que escribe "camaradas" y lo borda. Un desacierto que me ha sacado por completo de la experiencia y de la lectura. El libro ganaría mucho (todo) sin ese prólogo y cambiando las notas bajo los poemas por simples explicaciones de las acuarelas. Ostras, que es Machado. No necesita mucho más. Sí que tengo que decir que me ha parecido un acierto, y de muy buen gusto el tono que le da Julio Llamazares a su epílogo. Así que bueno, en resumen, un libro muy bueno con un desacierto importante de la editorial al dar carta blanca al prologuista y permitir que esas alas batan con tufillo politizado. Y conste que no soy de derechas. Ni de izquierdas. Simplemente que cuando leo me gusta interpretar yo solito, y no quiero que me adoctrinen. + Leer más |
En las emotivas páginas de esta obra, Quique Palomo (Vida y muerte de Federico García Lorca; Antonio Machado: Ligero de equipaje) adapta la obra de Ian Gibson, en la que trazan un certero recorrido por las vidas de cuatro magníficos poetas de nuestro tiempo: Federico García Lorca, Antonio Machado, Miguel Hernández y Juan Ramón Jiménez, en un estudio estremecedor sobre la lealtad a la causa republicana de cuatro de las mejores voces poéticas de la España del siglo XX, represaliada con la muerte en el exilio, el fusilamiento sin juicio y la muerte en la cárcel.
Antonio Machado, Juan Ramón Jiménez, Federico García Lorca, Miguel Hernández. La obra definitiva sobre los insignes poetas, de la mano del hispanista de mayor reconocimiento.