En este libro se cuenta la historia de varias familias con una abuela en común que se ven inmersos en plena crisis económica. Dada la situación crítica, todos tienen que irse a vivir a la casa de Mamelé. Allí surgirán los roces propios de la convivencia y todos tendrán que aprender a relacionarse de forma pacífica y a tolerar las diferencias entre ellos. Es una historia en la que se ensalza el valor de la familia, el respeto hacia las diferencias, la tolerancia, la resiliencia y el amor hacia los animales. El libro se divide en trece capítulos y en algunos de ellos aparece una ilustración en blanco y negro a página completa. Estas me han parecido muy expresivas y han sido capaces de reflejar totalmente lo que se estaba narrando en el capítulo. Es una pena que no haya alguna más. Aunque el libro está recomendado para niños a partir de diez años, creo que puede ser leído y comprendido perfectamente por niños de entre nueve y once años. Si algo he de destacar, es que de él he podido extraer algunas citas que invitan a la reflexión. Merece una mención especial esta: No estamos seguros de que vaya a salir bien, pero es que la vida es así. Si tuviéramos que esperar a estar completamente seguros de algo, nunca daríamos ni un paso. + Leer más |