Románticos.com

Quizás se deba a que las novelas epistolares nunca fueron santo de mi devoción, quizás a que la primera vez que lo leí me gustó demasiado - cosas de no leer apenas y encontrar un libro que me gustase - o quizás que simplemente me parece demasiado inverosímil.

La primera vez que leí Románticos.com fue un encargo del colegio. Ya sabéis, de esos que te mandan leer aunque no conozca el libro ni la familia de quien lo ha escrito. Sin embargo, en contra de la norma general, el libro lo leímos en clase e incluso me acabó gustando. Todo esto fue hace alrededor de diez años. Quizá un tanto menos. Pero el hecho es que disfruté leyéndolo, así que cuando lo encontré hace poco, abandonado en un cajón, decidí ponerle en la pila de libros que tenía para releer.

El libro comienza con la conversación en un chat de románticos entre Merlín y Brontë (entre otros), los protagonistas de la historia. al ver Merlín el nickname de Brontë piensa que puede ser algo más que una de las chicas empalagosas que pululan por la página, por lo que abre una conversación en solitario que termina siendo - a mi parecer - un gran fracaso debido a la indiferencia de ambos, la impertinencia de la chica y la chulería de él. Sin embargo, al final de la conversación Merlín le deja su email a Brontë esperando que ella le escriba, lo cual hace a las pocas horas de apagar el ordenador en un email que revela lo importante que ha sido para ella ese chat en solitario y lo mucho que ha agradecido su presencia.

Ahí es donde comienzan mis reservas a la hora de continuar el libro, y apenas han pasado dos o tres páginas desde que empezó. Lo primero, no creo que una persona a la que acabas de conocer y sobre todo con la que tan poco tienes en común a primera vista por los cinco minutos que habéis chateado te provoque tal sentimiento como para escribirle un largo email sobre lo importante que ha sido la conversación para ti. En serio, es que en la conversación no se habla de nada. Me tiene completamente indignada cómo los autores han forzado este lazo que une a los protagonistas desde el primer momento basándose en una conversación tensa y sin sustancia alguna. El problema es que desde aquel contacto el libro trata la relación de Merlín y Brontë como una entre un millón, unidos desde el momento en que se conocieron.

Románticos.com es una historia sobre la amistad, a pesar de que el título lleve a pensar otra cosa. Una historia acerca de cómo dos personas que no se conocen de nada se vuelven imprescindibles en la vida del otro, haciendo el papel de ancla en sus vidas cuando estas se vuelven difíciles y aconsejándose en otras ocasiones.

La forma de escritura tanto de Pertierra como de Galán (supongo que cada uno hizo un papel) me parece demasiado forzada, intentando adecuar el vocabulario a la manera de hablar de los adolescentes y fallando miserablemente. Sin embargo he de reconocer que los temas realmente importantes que se tratan en el libro - a pesar de ser usados con poca frecuencia entre las páginas del libro al menos hasta casi el final - son realistas. No se han tratado de maquillar, de idealizarlos y tampoco de exagerarlos para convertir el libro en un cuento con moraleja.

El final del libro, aunque esperado, me ha resultado completamente innecesario. La historia estaba completa sin él, podrían haberlo dejado allí y no llevarlo a lo obvio, pero decidieron hacerlo así.

En general, el libro puede ser curioso de leer, aunque no es nada destacable en la literatura. No engancha - o al menos a mí no me enganchó. - pero el tamaño de la letra y la manera en que está escrito hace que te lo puedas leer fácilmente en tres horas, quizás incluso en menos tiempo.