Notre-Dame

La tarde del 15 de abril, Francia lloró.
Esta vez por un símbolo.

No lo hizo sola.
Notre-Dame es la catedral del mundo y el drama, la angustia y la pérdida fue universal.

Parecerá frívolo, pero la aguja de Viollet-le-duc ardió como debe hacerlo una falla.
Los valencianos vemos cierta belleza en el fuego, y esa maldita aguja quemó bien, y cayó al vacío con todo el honor de la derrota, doblando los pies en su última astilla.
Mantuvo el esqueleto de su construcción hasta que las llamas la asesinaron transformándola en cenizas.

El fuego hipnótico confundió en su belleza la tragedia que mis ojos estaban contemplando, la catedral del mundo, mi catedral, herida de muerte.

¡La reconstruiremos! Fue la célebre frase de Macron que nos puso un nudo en la garganta a todos.

Follett, dedos a la obra, pone en este ensayo su granito de arena, pues todos los beneficios van para la fundación que se encarga de su reconstrucción.

Es un libro bonito, ya en su aspecto exterior, pequeño, tapa dura, doradas letras, una pieza de coleccionista, algo que gusta tener.

Su contenido fue escrito en una semana, no esperéis un gran trabajo de documentación, pero si de amor espontáneo.
Es íntima, lo que para el autor representa la catedral y el incendio sin cortapisas y ahí radica el secreto de este ensayo, anecdotario, desahogo o necesidad de Follett.

El libro nace en la pesadilla del autor al conocer la noticia.
En el nos cuenta como fue su construcción, su entorno político/social medieval y diversas reparaciones.

Hay un capítulo sobre Víctor Hugo, y la relación de la literatura con la catedral del mundo.

Lo malo, su brevedad.
Precisa y contradictoriamente, justo esto hacen de la obra para mi una joya un tesoro a mimar.

Tres veces he pisado el suelo de Notre-Darme.
Su olor, su inmensidad y lo insignificante que me siento siempre por el peso de la historia a sus pies.
Tan solo por rendirle pleitesia, Volveré.
¡Juro que lo haré!

El libro, más que por su contenido, es uno de esos fetiches que engrandecen mi librería por lo que representa.
Excelente contribución Follett.

Maravilloso pequeño gran libro!

En abril de 2019, Francia lloró y con ella el mundo, uno de sus símbolos, de sus emblemáticos y más queridos símbolos ardió en llamas: se quemaba Notre-dame.

Macro dijo: --La volveremos a reconstruir. --Y hasta quien lo odiaba, le amó. Así de intensas son las palabras. Y de palabras rodeó ese suceso el escritor, quien hubo de investigar mucho sobre catedrales medievales, su construcción, e incluso incendios, para su libro "Los pilares de la tierra". Por tanto fue convocado por la prensa y por los enamorados de la catedral a través de las redes. Partió a Francia, dio entrevistas y su editor le pidió escribir, escribir sobre el suceso.

De ahí nació este pequeño ensayo, que no por chico es poco, es mucho, es grandísimo. El escritor desde el amor, encontró las palabras para narrarnos este suceso y a su vez, la historia de su construcción, sus reparaciones, sus caídas, su aparición en la sociedad medieval y en la literatura, honrando a Victor Hugo y a otros muchos, en cuyo trabajo aparece esta Joya de la arquitectura y de la historia.

Las ventas de este libro fueron a una fundación para apoyo a su reconstrucción, otra belleza! Es un libro imperdible, hermoso, para atesorar.

Solo he estado en Paris una vez, estuve en medio de la pandemia (triste espectáculo, me perdí Paris), y Notre Dame estaba cerrada, aún me debo esta visita. La haré, la deseo, la necesito.

En Barcelona me emocioné viendo Santa María del Mar con el libro de Idelfonso Falcones en mi mano, en Notre Dame quiero entrar con Victor Hugo bajo el brazo y Ken Follet en el corazón.

Tras el incendio de la catedral parisina de Notre – Dame el 15 de abril de 2019, Ken Follet le dedica este ensayo donde rememora su construcción, que duró un siglo, la cual empezó en 1163. al igual que recuerda su remodelación en el siglo XIX tras los destrozos sufridos durante la Revolución francesa.
También diserta sobre las veces que ha servido de inspiración a diferentes autores, entre los cuales el más afamado es Victor Hugo que la puso en valor con su obra “Notre – Dame” o “Nuestra Señora de París” en castellano. Conocida internacionalmente por “El jorobado de Notre – Dame” en su versión inglesa y tras las diferentes películas y obras de teatro que ha inspirado.
Por otro lado, también fue testigo de coronaciones de emperadores, Napoleón, o del uso político que de ella hizo de Gaulle tras la liberación de París en la Segunda Guerra Mundial.
En definitiva habla del aprecio que los franceses y el resto del mundo tiene hacía esta obra de arte arquitectónica.

Breve libro creado por Ken Follett para colaborar en la reconstrucción de la catedral tras el incendio de 2019.
Muy pocas páginas para lo que nos tiene acostumbrado donde nos cuenta su tristeza cuando la vio arder y una pequeña historia de la catedral y de la influencia que tuvo en «Los pilares de la tierra»
Muy recomendable para conocer a Follett y para los seguidores como yo, a los que se nos hacen cortas sus novelas de 1.000 páginas esto no llega ni a ser un aperitivo.

Un librito cargado de sentimiento y conocimiento hacia esa hermosa gran obra. He tenido la oportunidad de verla en varias ocasiones y realmente es casi que imposible no enamorarse de ella. Cuando la vimos arder la lloramos en todas las lenguas porque quien la ha visto y quien ha estado ahí la lleva siempre en su corazón, y se ve que Follet la tiene tatuada porque lo que nos relata además de estar empapado de su sabiduría y estudio sobre las catedrales y sobretodo de Notre-Dame también nos plasma en cada página todo su amor y el gran pesar que significó para él esta tragedia arquitectónica. Me gustó mucho saber que parte de la recaudación de este libro serán para la reconstrucción de la catedral lo que demuestra una vez más la coherencia de sus actos con sus sentimientos. En fin un lectura ligera y buena como todas las de Kent Follet.