MALDITO SILVER

Hoy os traigo una reseña de una autora que me encanta. Joanna Wylde comienza una nueva serie que estará estrechamente ligada a la anterior, Reapers MC. Como sabréis si habéis leído la saga, Puck aparece por primera vez en Obsesión total, a partir de ahí ha ido teniendo cada vez más protagonismo en la serie hasta tener su propio libro.

Aunque este libro es una serie nueva, la que supongo estará centrada en los Silver Bastard. La acción se situa en el mismo marco temporal que Caída total, el quinto libro de la saga Reapers MC, desde el momento en que Puck y Painter salen de la cárcel, hasta un par de meses después del encuentro en la fiesta de los Bastards de Mel y Painter (protagonistas de Caída total), por lo que en el orden de lectura, sería el siguiente después de Caída total.

La historia comienza cinco años atrás, coincidiendo con la salida de Painter y Puck de la cárcel. Varios miembros de sus respectivos clubes se han unido para celebrarles una fiesta de bienvenida en el club de los Longnecks, donde Puck recibirá sus colores y dejará de ser un aspirante para pasar a ser un miembro de pleno derecho de los Silver Bastards.

En esta fiesta Puck conocerá a Becca, y se sentirá atraído de inmediato hacia ella. Teeny, el anfitrión de la casa, se la presenta y le anima a enrollarse con la chica. Esa noche juntos, marcará un antes y un después para ambos. Pasa algo bastante grave que no os voy a contar... y al día siguiente Puck se marchará de allí con Becca para salvarla.

Han pasado cinco años y Becca trabaja en Callup, Idaho, (una ciudad cercana a Coeur d'Alene hogar de los Reapers) como camarera. Ha sido un duro camino para superar los abusos sufridos, pero ha conseguido cambiar su vida. Becca ha acabado el instituto y está a punto de graduarse en la escuela de estética. Se ha mantenido alejada todo este tiempo de los moteros y su mundo, que la aterran.

Durante estos cinco años Puck ha mantenido las distancias con Becca, él sabe que ella está aterrorizada con cualquier cosa que tenga que ver con moteros, se siente terriblemente culpable por lo ocurrido, por lo que se ocupa de cuidarla desde lejos.

El libro está narrado en primera persona por ambos personajes, alternando la narración de uno a otro en diferentes momentos de cada capítulo, algo que resulta interesante, pues conoceremos el punto de vista de ambos durante la narración. La historia retrata el mundo de los clubs de moteros y sus tejemanejes con mucho realismo y es que la autora sabe unir a la perfección la rudeza de ese mundo, el romance y el drama. Las escenas sexuales, como en anteriores libros son explicitas y el lenguaje que utiliza la autora sigue siendo crudo y vulgar, aunque la verdad, algo menos que en sus anteriores libros. Aunque habremos de esperar casi medio libro para que la tensión sexual entre ambos se vea resuelta.

He encontrado unos protagonistas complicados, con mucho en común, ambos han tenido infancias difíciles dentro del mundo de los moteros, aunque ella lo ha tenido mucho más difícil que él.

Puck es un chico duro, su padre era un Bastard y se ha criado en ese mundo, aunque ha tenido que pelear duro por ganarse su lugar. Vive solo para el club hasta el momento en que conoce a Becca. Puck me ha resultado un misterio, pues la autora nos lo describe de manera superficial, se deleita más contándonos sus sentimientos por Becca. Sabemos que es un tipo duro, que soluciona los problemas del club, grandote como un armario, leal hasta la muerte con las personas que quiere y, aunque intente esconderlo, con un corazón de oro.



Becca es una chica fuerte, pero asustada, los abusos sufridos la han dejado muy marcada y lucha a diario para superar sus miedos. Ha salido adelante y quiere ser autosuficiente y no depender de nadie, para eso se esfuerza mucho en acabar sus estudios mientras trabaja como camarera. Es fuerte y decidida, aunque su lucha interna entre lo que siente y lo que debería sentir, la aterra. Se ha esforzado mucho en apartarse de ese mundo y no parecerse a su madre, ella quiere ser "normal" y se siente muy avergonzada de los sentimientos que le provoca Puck, pero no puede evitarlos lo que conllevará varios enfrentamientos entre ellos donde Becca sacará su mal carácter, llegando a ser realmente injusta con Puck a menudo.

Aparte de los personajes principales, encontramos a los personajes de la serie Reapers que también aparecen con asiduidad en estas páginas, y a los componentes de los Silver Bastards, alguno de los cuales ya conocíamos de los anteriores libros, como Bonnie y su dama, Darcy. También encontraremos nuevos personajes, como Earl y Regina, una pareja adorable que se hace cargo de Becca a su llegada a Callup. Conoceremos a Blake y Danielle, los mejores amigos de Becca y su apoyo en todo.

Ahh, y los chicos de la academia, un internado pijo donde van los chicos problemáticos de las familias bien para evitar acabar en la cárcel. Shane y Rourke son descendientes de una familia de la mafia irlandesa que controlan la mina en la cual se basa la economía de la ciudad de Callup, Shane será el heredero de la mina en cuanto cumpla los 21, y Rourke es su guardaespaldas y tienen toda la pinta de ser los próximos protagonistas de los libros de esta serie, pues el epílogo extra va sobre ellos y me ha dejado muy intrigada.

La mina forma parte importante en la vida del valle, si os fijáis, el parche de los Silver Bastard lleva una calavera con casco minero, y un pico y un mazo detrás, muy representativo ¿no? 😉

El padrastro y la madre de Becca son para echarles de comer aparte, a él lo odias desde el minuto cero, con ella vas pasando por diferentes grados de emoción, desde la pena, hasta el aborrecimiento. Yo por mi parte la he destetado y desde luego no se merece una hija como Becca.

Bueno, no puedo ser objetiva con esta autora porque me encanta, creo que verdaderamente se ha ido superando con cada entrega y el libro me ha encantado.
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