La verdad que me he quedado un poco fría con esta historia. El arte me ha gustado, sobre todo veo muchísimo estudio para mostrar un Japón autentico que te hace sentir que viajas hasta la era Meiji. PERO, la historia me ha parecido poco original, una especie de mezcla de memorias de una geisha con extractos de novelas japonesas. La línea de continuidad entre los diferentes eventos es débil, parecen como simplemente pegados los unos a los otros. No se trabaja mucho la psicología de la protagonista por lo que es es difícil empatizar con ella y, por tanto, que la historia te llegue dentro. Veía sucesos dramáticos ante mis ojos... y no sentía nada. No sé... Está bien, pero no me ha encantado. Eso sí, la edición, una joya. |