Florescencia

La autora cuenta la vida de Masechaba a través de su diario, una niña sudafricana que estudia para ser médico y reflexiona sobre lo que ocurre a su alrededor. Habla de los ecos del apartheid, de racismo, de xenofobia, de la diferencia de clases, de los mitos asociados a la menstruación, de la cultura de la violación, del duelo, de enfermedades mentales, de religión y superstición ¡¡en solo 128 páginas!!

La narración que se divide en cuatro partes. Es dura y directa. A lo largo de la lectura sentí impotencia, rabia, compasión... y en la última parte la autora pone el broche final haciéndome sentir una gran admiración por la gran resiliencia de su protagonista.

La novela está dividida en cuatro partes muy bien diferenciadas. En la primera parte, nos vamos a encontrar con la protagonista de pequeña. Masechaba es una niña sudafricana que sueña con ser médica de mayor. Quiere vivir para mejorar la vida de los demás. En la segunda parte veremos como Masechaba ha conseguido su deseo y actualmente es médica de un hospital. Pero no es feliz, ya que ha descubierto el odio y todo la malo que hay en el mundo que la rodea.

A través de las diferentes personas con las que tiene relación, veremos como la xenofobia es una realidad a día de hoy entre los propios países africanos, y que esta es culpa de, nuevamente, la opresión de los blancos. Llegaron, promovieron el odio, cogieron los privilegios y dejaron un continente debastado en muchísimos aspectos. No sabía mucho sobre el "apartheid" y todas las leyes racistas que se aprobaron y estuvieron en vigencia durante tantos años, y me ha dejado un mal cuerpo increíble.

Y es todo este odio, que ha evolucionado y sigue haciendo mella a lo que se tendrá que enfrentarse Masechaba día a día. de pronto un día tomará el impulso de luchar por lo que es justo, por el respeto y la igualdad de todos, sin importar de donde vengan. Y claro, cuando en un país terriblemente machista, una mujer alza la voz contra algo que está mal, nunca es visto con buenos ojos. Y es ahí donde empieza la tercera parte de la trama.

No voy a entrar en detalles, pero es la parte más depremiente y dolorosa. Dura y cruda, ha conseguido sacarme muchas lágrimas, además de mucha impotencia, porque realmente es la realidad de las mujeres en gran parte del mundo. Es imposible no empatizar con la protagonista y te horroriza ver como no tiene armas para luchar, para alcanzar la justicia.

Desde que descubrí hace algún tiempo esta pequeña novelita, sabía que en algún momento acabaría leyéndola. La portada me llamó la atención, y la trama me entusiasmó. Finalmente, me animé y el resultado ha sido muy positivo. Podría haber sido una lectura redonda si no fuera por su brevedad, y porque el final, aunque coherente, se me ha hecho muy abrupto. No sé, quizás necesitaba despedirme de un personaje tan interesante como Masechaba de una manera más pausada. Aún así, muy muy recomendable.

Las mujeres molestan. Las que han conseguido sacar una carrera de éxito pese a todo molestan más. Las que no saben dónde está su sitio ni su límite molestan mucho más. ¿Pero las mujeres que se atreven a alzar la voz contra el sistema que las maltrata, las reduce a la nada y las condena a una vida de miseria? Esas mujeres son lo peor. Nuestra protagonista se llama Masechaba, pero bien que se podría llamar Laura, Maggie, Xing Yui, María Rosaura o Amelie. Masechaba es negra, es doctora, es inteligente, es antiracista y no duda en condenar las injusticias. Ese es su delito. ¿Su condena? Una violación. Y entre medias, una amiga de Zimbabue racista para con los blancos y una madre carcomida por la idea de un Dios cruel y sádico, que fomenta la vergüenza de nacer mujer. La autora tiene una voz potente y profunda y critica muchos aspectos de la sociedad actual de Sudáfrica: los ecos que quedan del apartheid, el discurso racista contra los inmigrantes negros que llegan de países vecinos, el machismo, el fundamentalismo religioso y las supersticiones de un pueblo poco culto hacia la menstruación, el suicidio o la depresión. Jamás había leído un libro sobre Sudáfrica y en algún momento me ha costado entender ciertas actitudes o comportamientos de la protagonista o de su entorno. “Estar viva es lo más peligroso del mundo. En cualquier momento puede pasar cualquier cosa. Estar muerta es más seguro” … Sobre todo, si eres mujer, añado yo. Este libro me ha gustado mucho. Primero, por poner en valor la sanidad pública (en un momento de pandemia como el actual) y segundo por hacerme reflexionar. ¿Hasta qué punto existe un racismo hacia los blancos? ¿Cómo surge y se fomenta un racismo entre personas negras? ¿El propio racismo hacia los negros ha provocado una marginación entre personas negras? ¿Cuáles son las claves para acabar con la xenofobia? Desconozco si Kopano ha escrito más novelas, pero estoy convencido de que quiero leer más cosas suyas. Crítica, potente, emotiva, reflexiva… Este testimonio corto tiene todo lo que me gusta. Lo incluyo en el #retomujeresautoras como voz femenina racializada y en el #24retosdelectura en la categoría 23 (personaje principal sea médico).

Esta novela tan cortita de Kopano Matlwanos acerca a la vida de Masechaba, una mujer que desde niña sueña con ser médico en una Sudáfrica golpeada por el apartheid.

Con una narración desgarradora (hay historias inspiradas en la vida de la autora) el libro aborda temas tan duros como: la menstruación y cómo afecta durísimamente a muchas mujeres; la lucha de género, el racismo, el abuso, la violación, el miedo.

No quiero contar demasiado de esta historia, creo que lo mejor es ir a ciegas y dejarte llevar en un viaje repleto de emociones, de dureza y de aprendizaje. Quizá no es un libro que recomendaría a todo el mundo, no creo que sea para todos los gustos, sin embargo, sí creo quesea necesario para comprender la problemática que viven muchas mujeres hoy en día.

El título original de este libro es "PeriodPain" totalmente acertadísimo como la historia de la protagonista.

Este libro tan cortito alberga una historia muy dura pero que está escrita de forma desgarradora y a la vez, bella. Creo que es un libro precioso. Trata tantísimos temas que no sé cómo hablar del mismo y recomendarlo a todo el mundo.

El tema que más afecta a la protagonista en primera instancia es el de la menstruación y como a muchas personas nos resulta incapacitante, la falta de investigación clínica para solucionar los dolores y las patologías asociadas con la regla, la vergüenza en la infancia. Para Masechaba la regla es como una criatura, una bestia que consigue dormir a veces, y dejarla en paz, pero que sigue viva.

Es precisamente por esto que decide estudiar medicina. Pero no es un camino de rosas. En esta novela tan cortita está muy bien reflejada la idea de que ejercer tu "pasión" puede ser muy sacrificado, hasta llegar al punto de sentir que odias lo que amas. En el hospital, conoce a Nyasha, que le hace ver la realidad de la creciente xenofobia en Sudáfrica desde el Apartheid. "Los blancos nos enseñaron a odiarnos entre nosotros". Masechaba decide involucrarse y tomar partido y hasta aquí puedo leer porque no quiero destripar nada.

Si tuviese que resumir el contenido de esta historia diría que se articula en torno a tres ejes: raza, pobreza y género; y que trata temas como la xenofobia, la cultura de la violación y el eterno cuestionamiento a la víctima, la relación con Dios, la superstición, las enfermedades mentales y la depresión.

Pero es que para entender por qué estoy fascinada por cómo escribe Kopano tienen que leerla. Su prosa es una maravilla y te hace copiar miles de sus frases en un cuaderno, subrayarlas, y admirarlas, para poder recurrir siempre a ellas.

Su historia te deja grietas, te parte en dos, después de leer el libro he sentido el mismo deseo que la autora expresa en una ocasión: "desearía mirarme por dentro para ver si hay algo roto".