El secreto del ruiseñor

Un clásico que me apetecía leer y, aunque lo he disfrutado, muchas de las decisiones de su protagonista, Susanna, una mujer de la que se destaca un poder senador en las manos que tampoco importa mucho en la historia, me han descolocado. También su actitud ante las relaciones humanas y ante la vida, aunque, obviamente, entiendo que estamos ante una novela ambientada en el Londres victoriano y que son comportamientos propios de la época.
La autora introduce en el libro tramas muy interesantes, aventureras, podría decirse. Viaje a la India, Venecia, la Guerra de Crimea, Alemania... a veces ocurre todo tan de prisa que no te da tiempo a asimilar lo que ha pasado (por ejemplo, con alguna que otra muerte y una especialmente que me resultó purísima). Novela repleta de desdichas, de romances inesperados, de personajes que aparecen y desaparecen, que entretiene y conmueve.

Susana tiene un don: con sus manos puede aliviar el dolor de las personas. Ella vive en la India con su padre y contrae matrimonio con Audrey, fijando su residencia en un antiguo monasterio familiar en St. Clare (Reino Unido). de pronto el esposo comienza a comportarse de forma rara y violenta, hasta el punto de llegar a ser un infierno.
Esta es a grandes rasgos el argumento de esta preciosa novela. Tiene toques de suspense en medio de una apasionante historia de una mujer que se supera a pesar de las tragedias que acechaban su vida, que lucha por llegar a ser enfermera, profesión que era muy mal vista en aquella época.
Me gustó muchísimo, además trae el añadido de que la protagonista colabora directamente con la Florence Nightningale en la Guerra de Crimea.
Recomendable: al 100%