El misterio de las cuatro cartas

Todo comienza cuando Poirot, al regresar a su casa, se encuentra con una mujer enfadadísima con él. Ha recibido una carta en la que se le acusa de haber asesinado a Barnabas Pandy. Una carta que Poirot no ha recibido. de hecho, ni siquiera conoce al tal Pandy. Para más inri, un hombre le espera en el salón de la casa con una carta similar en la que, en este caso, se le acusa al portador del mismo asesinato. Así hasta cuatro cartas, cuatro “acusados” por Poirot.

Poirot decide tomar cartas en el asunto (perdonadme la redundancia) e investigar quién fue Barnabas Pandy y cómo murió. El desconcierto aumenta cuando descubre que murió por causas naturales. ¿O no? ¿Alguien sabe que fue asesinado y no quiere que el crimen quede impune? ¿Es por eso que ha decidido involucrar al gran Poirot en el asunto?

Os voy a contar un secreto: me inicié en la literatura de adultos con Agatha Christie. Poco tiempo después vinieron Victoria Holt y Alberto Vázquez Figueroa pero la primera fue Agatha Christie. Yo pasé de leer cómics de Mortadelo y Filemón y libros infantiles tipo Las mellizas en Santa Clara o Puck, a la literatura de adultos sin pasar por la juvenil que, no sé si entones no había mucha, o es que yo no supe encontrarla.

Agatha Christie fue mi mentora y, no sé yo, pero me da que la causante de mi afición a la literatura de misterio. En su momento devoré más de cincuenta de sus novelas (creo que son unas ochenta) y, tonta de mí, jamás adiviné quién era el asesino. Igual es porque yo soy muy inocente o porque ella es muy tramposa y es que, no nos vamos a engañar, era prácticamente imposible adivinar quién era el asesino porque siempre se sacaba un as de la manga. Os cuento una anécdota ilustrativa: en una ocasión, ya de mayores, la cuadrilla fuimos en pleno a ver una obra de teatro inspirada en una obra inscrita por ella (no recuerdo ahora el título). Entre todos los asistentes que acertasen quién era el asesino, sorteaban un crucero a Porsmouth. ¿Os podéis creer que éramos más de diez y que absolutamente ninguno dio con la respuesta correcta?

Agatha Christie es, sin duda, la escritora de novela de misterio más conocida y que más ejemplares ha vendido. Y Hercules Poirot el detective más famoso del mundo. Como ya sabéis, creó dos detectives: Poirot el profesional y Miss Marple la aficionada. ¿Cuál os gustaba más a vosotros? A mí, sin duda, Poirot. Por eso, en el momento de su publicación, leí “Los crímenes del monograma”, donde Poirot “resucitaba”. La experiencia fue satisfactoria y por eso decidí leer también este libro



Creo que Sophie Hannah ha captado la esencia de Poirot el cual, más o menos, se comporta de la forma que yo espero. Hace muchos años que no leo una novela de Agatha Christie pero, leí tantas, que tengo un recuerdo bastante claro del gran detective belga. Y ese Poirot es el que me he encontrado, de nuevo, en una novela de Sohpie Hannah.



Una vez más, Poirot investigará junto a su colega y amigo Catchpool, detective de Scotland Yard, una pareja de investigadores que funciona a la perfección. La trama, intrigante desde el principio, se va enredando hasta que, poco a poco, la autora nos va dejando ver los flecos de donde poder tirar para desenrollar la madeja. Por supuesto, hay algún giro inesperado y nos espera alguna que otra sorpresa. Lo cual no quita que, en un determinado momento, ya haya podido adivinar por dónde iban los tiros y que, por lo tanto, el final me haya resultado un tanto previsible.


Conclusión final

S os gustan las novelas de misterio al estilo clásico, “El misterio de las cuatro cartas” puede ser una buena opción. En mi opinión, una novela ideal para estos caloes. ¿Sabéis por qué? Porque yo siempre leía las novelas de Agatha Christie en verano, en casa de mis abuelos en el pueblo (a veces una al día). Por lo que, para mí, Agatha Christie y vacaciones de verano van indisolublemente unidas.
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Me ha encantado volver a leer una novela de este tipo, recordándome tanto a Agatha Cristie, y con Poirot de protagonista.
La novela comienza cuando nuestro gran detective se encuentra con una mujer, la cual ha recibido una carta firmada por él, y en la que la acusa de haber matado a Barnabas Pandy. Por supuesto, algo que este no ha hecho, y que ni siquiera conoce a ese tal Barnabas. Ademas, durante ese dia, recibe a otras tres personas que le acusan de lo mismo.
Asique, Poirot, no se queda sin hacer nada y decide investigar que ha pasado y quien es este tal Barnabas… a partir de aquí, empieza a descubrir muchas historias a las que buscara sentido como siempre ha hecho.
Una historia, que, aunque no sea de Agatha no te va a dejar indiferente, una trama que desde el principio te intriga, la gran cantidad de personajes tan bien descritos, y como no el gran final, ese final que siempre Poirot hace, reuniendo a todos los personajes y explicando cada cosa para que todo quede hilado.
Una novela que recomiendo, igual que todas las de Agatha, para pasar un buen rato y leerlo en un abrir y cerrar de ojos.

La reseña de hoy es de una novela negra de las que a mi me gustan: El Misterio de las cuatro cartas de Sophie Hannah y publicada por Espasa. Sophie Hannah es la encargada de seguir las aventuras de Hércules Poirot después de que Agatha Christie falleciera y no pudiera continuar con su saga negra. ¿Ha estado a la altura de la reina de la novela de detectives? Sigue leyendo

Cuatro personas reciben una misteriosa carta acusandoles de asesinar al viejo Barnabas Pandy. Esta carta está firmada por el famoso Hércules Poirot, pero él afirma que no ha escrito ninguna de esas cartas y de que no conocía a los acusados ni a la víctima. Además, Barnabas Pandy murió de forma accidentada quedándose dormido mientras se bañaba...¿o no?

Agatha Christie es una de mis escritoras favoritas y si algún autor o autora decide continuar su legado, yo me apunto y me leo todo lo que salga, aunque sepa que nunca habrá nadie como Agatha y que sus historias serán únicas. La verdad por delante, nadie puede reemplazar a Agatha. Pero Sophie Hannah es una autora autorizada por los familiares de Christie para seguir las aventuras del carismático y peculiar detective belga Hércules Poirot y la verdad es que se le da francamente bien. Este es el primer libro que leo de Sophie, con su nuevo Poirot, y me ha gustado. Creo que ha creado una historia muy digna de Agatha y tiene su esencia, lo cual es lo más importante para mi.


La trama me ha gustado, aunque no me ha llegado a emocionar. Estamos ante una lectura entretenida, pero sin más. Es muy amena y se lee en nada, a mi me ha durado dos tardes más o menos. El patrón es el mismo que en las novelas principales: un ¿asesinato? , un montón de sospechosos y en medio de todo Poirot, intentando resolver el caso con su ingenio, destrozando cortadas y averiguando motivos personales. El Poirot creado por Sophie Hannah me ha gustado mucho y en muchas ocasiones no había diferencia entre este y el original. Los demás personajes siguen en su linea, todos sospechosos, con secretos a sus espaldas y motivaciones ocultas.

El final, aunque no me ha llegado a sorprender, me ha gustado y me ha parecido muy correcto, hilando todo de principio a fin, sin dejar cabos sueltos. En general, la autora ha hecho un buen trabajo, y sobre todo, muy respetable y meritorio.

En definitiva, El misterio de las cuatro cartas es una buena novela de misterio, digna sucesora de Agatha, entretenida e interesante. Seguiré leyendo este nuevo Poirot, sin duda.
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Sophie Hannah me parece un acierto como sucesora para escribir las continuaciones de los libros de Hercules Poirot, el celebre detective belga (¡ cuidado con insinuar que es francés !) ideado por Agatha Christie. La escritora sabe hacer suya la obra de Christie, lejos de imitarla sigue manteniendo su propio estilo en la estructura de las novelas y el tratamiento de los personajes. Aun así, la esencia sigue siendo la misma: crear historias de misterio e intrigas en ambientes de aparente placidez y cotidianidad, donde nada es lo que parece y todos los personajes esconden muchos secretos. de hecho, pueden parecer caracteres simples , pero ahí radica uno de los puntos fuertes de Agatha Christie como autora, que Hannah sabe imitar perfectamente: son mucho más profundos de lo que parece a simple vista y son muy humanos.
Disfrute mucho leyendo este libro, al igual que las novelas que le precedieron. La historia engancha y no puedes parar de leer hasta descubrir quien o quienes son el o los asesino/s. A todo esto ayuda una prosa fácil y agradable de leer.
Espero que hayan más de estas continuaciones, en serio.

A pesar de ser el tercer libro de la autora, en el que cuenta una aventura de Hércules Poirot, ya quiero leer los anteriores, porque me ha gustado como mantiene la esencia del personaje creado por Agatha Christie. Hace muchos años que soy seguidora de Poirot y sus casos tanto en novelas como en televisión y cine, ya que desde siempre me han gustado las historias de detectives.

La novela tiene 416 páginas, estructuradas en cuatro partes que a su vez se dividen en 39 capítulos.

En esta ocasión nos encontramos con que el detective esta paseando y de repente es avasallado por una mujer enfurecida que le enseña una carta presuntamente firmada por él y en la que la acusa del asesinato de Barnabás Pandy, un hombre al que ella dice no conocer. Todo se complica cuando se descubre que se han mandado tres cartas más, como esa, acusando a cada uno de los destinatarios de cometer el crimen de Barnabas Pandy, y firmadas por Hercules Poirot.

Desde este punto de partida, comienza esta nueva aventura de Poirot, desde el cual el detective se dedicará a investigar a cada uno de los poseedores de las cartas y ver qué relación tienen entre sí y con el fallecido.

La lectura de este libro es muy amena y es de esos libros que engachan, de los que quieres saber quién es el culpable y te hace que no puedas parar de leer. Aunque el protagonista es Hercules Poirot, no está escrito con la maestría con la que lo hacía Agatha, ya que ella nos iba dando pistas a lo largo de toda la narración en todas sus historias, y es algo que me ha faltado en esta nueva aventura del detective. A pesar de eso me ha gustado, y lo recomiendo porque es adictivo, y como todos los libros de este tipo te enganchan hasta el final.

Algo que difiere a Sophie de Agatha Christie es que, en los libros de la creadora de Poirot jamás adiviné quien era el asesino en ninguno de sus libros, y que una vez que sabía quién era sí que ataba cabos y tenía lógica el nombre del culpable. Con el Poirot de Sophie Hannah, no me ha pasado eso porque era algo previsible y hay un momento de la novela en el que se sabe quién es, o al menos a mí me pasó. A pesar de ese detalle si que tiene la esencia del Poirot que todos conocemos, en cuanto a carácter y forma de actuar.

A pesar de esa diferencia con los libros de Agatha, recomiendo la novela, bajo mi punto de vista es ideal para leer sobre todo ahora en verano que nos gusta leer cosas más livianas y menos densas. Así que si sois seguidores de las aventuras de este detective os gustara saber de nuevo de él.
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