El abrazo del vampiro

Hace tiempo que leí la primera y segunda parte, y la primera parte me enamoró completamente, para mí no existía nadie más que Yvan (💓). Hasta que han aparecido Frédéric y Jon, y Brian y Eva.

Pero vamos a empezar a destripar esta novela de fuera hacia adentro.

La portada de El abrazo del vampiro, obra de Alexia Jorques (mi enorme enhorabuena, Alexia) es una pasada. Llama la atención desde lejos porque tiene un halo muy misterioro, con ese palacete en la parte inferior y esos protagonistas en la parte superior.

El interior es perfecto. Si bien es una maquetación sencilla, todo es muy claro, con la letra grandecita que facilita la lectura y en general es muy muy cómodo de leer.

La novela tiene un total de 433 páginas, divididas en 31 capítulos que no son excesivamente largos (unas siete u ocho páginas por capítulos, más o menos), cosa que se agradece.

La historia gira en torno a Frédéric y Jon, un vampiro y un forseker que se sienten dependientes uno del otro debido al "vínculo", pero Jon no es gay y se resiste a aceptar el dichoso vínculo que le está haciendo perder la cabeza. La lucha entre la razón, lo que debería ser, y el corazón.

La historia consigue engancharte desde el primer momento, y más aún si has leído las partes previas, porque en ellas aparecen personajes anteriores que prosiguen en la historia y de los que puedes quitarte ese gusanillo de saber qué más ha pasado con ellos.

Sí que es verdad que si no has leído antes, como yo, nada de este tipo de relaciones (me refiero a relaciones entre dos chicos), llama más aún la atención por el echo de saber cómo aborda la autora el tema. Y lo hace de una forma exquisita. Las relaciones tanto amorosas como sexuales entre Fred y Jon, las explica de manera suave, describiendo las escenas sin ser vulgar, com mucho cariño y sabiendo lo que escribe y cómo lo escribe.

El lenguaje es muy sencillo, a excepción de algunas palabras que puedes encontrarte que definen las criaturas de las que trata la historia (Forseker y poco más), pero por lo general se entiende muy bien y no hay problema ni confusiones.

Los personajes están todos súper bien caracterizados, a veces te dan ganas de darles una torta y otras de achucharlos, pero lo que sí está claro es que todos son especiales y cobran, todos, la misma importancia en la novela. Porque, aunque la historia gira en torno a la relación entre Fred y Jon, conoceremos varias parejas que también son importantes y que nos presentan para, espero, continuar en los siguientes libros, como son Brian y Eva.

Tengo que decir que tiene también partes bastante divertidas con las que soltaremos muchas risotadas, sobre todo con Jon, que es un bocazas y junto con Fred nos lo vamos a pasar pipa, y escenas con mucha acción que se van entrelazando de forma que no te das ni cuenta y hace que te enganches más y más.

Me ha sorprendido mucho Fred. Porque en los libros anteriores se describe como un vampiro frío, un perfecto líder, y ver el progreso, cómo cambia y deja ver esa parte dulce que despierta el amor, es algo precioso y a la vez sorprendente. Cómo cuida de Jon, cómo se preocupa de él y cómo ese vínculo lo martiriza cada vez que Jon lo rechaza.

Ains, el vínculo... eso de que cada uno tenga una persona destinada y la necesidad de cuidar, proteger y amar a esa persona... es tan bonito...y Fred creo que es el claro ejemplo de "Vínculo", más incluso (aunque esto sea ser infiel a mi querido Yvan, del primer libro de la serie) que Yvan y Alix, que ya de por sí me encantó la relación que tenían. 💓

En general la novela no me ha defradudado para nada, es tal cómo me esperaba y ha sido incluso mejor. Un mundo oscuro que, a su vez, está lleno de luz y de amor.

Una historia en la que la amistad, la lealtad y el amor resalta por sobre todas las cosas.


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