Efecto dominó

Cuando vi, a primeros de año, esta novela entre las novedades de la Editorial Grijalbo, me sentí atraída de inmediato por ella y quise comprobar qué la hacía merecedora del Premio de Novela Negra Europea 2016. Galardón que en anteriores ediciones se concedió a autores de la talla de Pierre Lemaitre o Víctor del Árbol. Hasta ahora no he podido hacerme con un ejemplar y por eso os traigo mis impresiones sobre una novela muy recomendable, de compleja trama, que me ha sorprendido gratamente.
Efecto dominó es la tercera entrega de la serie protagonizada por Víctor Coste, pero la primera que se ha publicado en España. Creo que no es necesario leer las dos novelas anteriores porque yo no he encontrado ningún misterio solapado en el pasado de su protagonista, al menos el autor no lo da a entender.
La novela se encuentra estructurada en cinco grandes partes y un total de 78 capítulos de corta extensión, lo cual aporta dinamismo y frescura a su lectura. Comienza con un breve prólogo que nos muestra a un destrozado Víctor Coste, capitán de la policía francesa, que necesita asistencia psicológica. Ha matado a una persona en legítima defensa y un miembro de su equipo ha fallecido. Estos acontecimientos captarán nuestra atención desde el principio porque nos urge conocer la identidad de la persona fallecida y cuál ha sido la secuencia del suceso que dio comienzo tres meses antes. A esta ecuación vamos a sumar la combinación de diferentes líneas argumentales sin un vínculo aparente y obtendremos una trama tensa y llena de suspense, con giros inesperados y sorprendentes.
Nano Mosconi acaba de ingresar en Marveil, el mayor y más degradante Centro Penitenciario de Europa, una prisión con las dimensiones de una ciudad, por un delito de hurto. Él no está hecho para aquel infierno, es incapaz de defenderse y teme por su vida. En Marveil hay presos que son víctimas de represiones violentas, injustas, constantes y autorizadas. Los vigilantes son demasiado permisivos y su única misión es la de intentar volver a sus casa enteros. Consienten que los reclusos se insulten, se peleen, trapicheen o se droguen. El único límite moral es el suicidio y el asesinato. Aquella prisión es una verdadera jungla sin ley. Alex, la hermana de Nano, se va a encargar de sacarlo de allí al precio que sea para demostrarle así a su padre que puede ser una buena líder de su clan, tan capaz como cualquier hombre.
El capitán Víctor Coste no vuelva a hacer acto de presencia hasta la segunda parte de la trama. Nuestro protagonista se encuentra al frente del Grupo Crimen I de la SDPJ93 (subdirección de la policía judicial, departamento 93). Su equipo es el encargado de investigar el secuestro con extorsión de un chaval de diecinueve años. Los negocios de consultoría informática del padre de la víctima funcionan muy bien y eso les ha colocado una gran diana en la espalda. Se van a enfrentar a unos secuestradores extraordinariamente prudentes y que han sabido montar el golpe inteligentemente, pero el caso tendrá un desenlace totalmente inesperado.
Uno de los puntos destacables de Efecto dominó son sus personajes, tanto los principales como los secundarios, sobre todo el de su protagonista principal, Víctor Coste. Un personaje muy humanizado que se aleja del estereotipo del detective de novela negra, inteligente, honesto y afable, de impecable valor y moral inquebrantable, capaz de darlo todo por su equipo. Pero está cansado, ha perdido la confianza en sí mismo y en el sistema.
Gracias a un narrador omnisciente con acceso a los diferentes escenarios y puntos de vista de todos sus personajes, su autor nos irá mostrando la secuencia del descabellado plan de un abogado corrupto y sin escrúpulos que será el desencadenante que pondrá en marcha el mecanismo de la caída encadenada de todas las piezas de esta compleja trama, una tras otra, cual fichas de dominó. Desde su comienzo cuenta con un ritmo algo lento debido a que el narrador ha de sumergirnos en el amargo día a día del penal de Marveil, pero posteriormente irá in crescendo y al final se precipitará en una carrera irrefrenable, con un cierre correcto, que no deja ningún cabo suelto, sorprendente y efectista, como no podía ser de otro modo.
Nos encontramos ante una novela oscura, carente de artificios y a la que no sobra ni una sola página. Con un estilo directo, una prosa sencilla, unos diálogos fluidos y una narrativa muy audiovisual, Olivier Norek nos provoca y juega con nosotros al ir revelando dosificadamente piezas que irán encajando en un puzle que nos mostrará una historia llena de giros argumentales y más compleja de lo que en principio parecía. Un final donde nada es blanco o negro y donde incluso los criminales pueden tener algo de humanidad.
En resumen, Efecto dominó es un thriller carcelario muy bueno y con esencia propia, cuya sólida trama, que tiene una linealidad cronológica de tan sólo doce días, cuenta con los ingredientes necesarios para mantenerte adherida a sus páginas, logrando sostener el suspense de principio a fin, en una carrera a contrarreloj que te dejará sin aliento. Una novela que se devora con rapidez, a la que no le faltan giros argumentales potentes y en la que se combinan con acierto la venganza, la lealtad y la amistad, la corrupción, la justicia y la injusticia, la conspiración y la violencia en su máximo exponente. Un autor al que seguiré la pista y que recomiendo a todos los lectores del género

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“Aunque las prisiones están en un lamentable estado, no deja de ser muy complicado. Además, eso solo le proporcionaría una vida de fugitivo. Digamos que es una forma de evasión. Algo más inteligente, sin puertas que exploten ni helicópteros. Una fuga, digamos, legal”. ~ Efecto dominó de Olivier Norek.

Nano Mosconi es apresado por robo. Él opera en la banda de su hermana Alex junto con Dorian, pareja de esta, Rinho y Franck. Tras un atraco a una joyería, Nano comete el error de que lo pillen con un reloj numerado y es destinado a la prisión de Marveil, una de las más duras de la zona de Paris. Su hermana se plantea como objetivo sacarlo de allí lo antes posible y con la ayuda de su abogado urde un plan que va a tener más de una consecuencia.

Mientras en la policía judicial de Sena-Saint-Denis, el capitán Victor Coste y su equipo encabezan la investigación de un secuestro. Este caso acabará siendo una pieza del puzzle que más adelante tendrán que armar para lograr resolver varios crímenes.

La verdad es que poco más puedo contar de la trama pero sí deciros que si queréis un libro que sea acción y un verdadero pasapáginas, aquí tenéis uno. La trama es un no parar de comienzo a fin, no sabes por dónde va a salir porque a medida que avanza van pasando muchísimas cosas que se van enredando unas con otras. Está escrito de una forma muy sencilla, clara y directa y la verdad es que se lee solo.

Creo que este es el tercer libro de este investigador pero parece que en España no han sido traducidos. de cualquier forma, no te pierdes en la trama ya que la parte dedicada a la vida personal es menor con relación al caso. Es el segundo libro que leo de este autor. El primero fue “Impacto”, que ya califiqué como una de mis mejores lecturas de 2021. Me gusta bastante su estilo y sus tramas diferentes.

Este policial es de lectura adictiva, con diálogos que percuten fuerte más una alta dosis de humor.
La historia parte con un rapto en el departamento 93 al Norte de Paris (Seine Saint Denis), rapto que tendrá muchas ramificaciones y una descripción del ambiente en prisión, de antología (la prisión de Marveil es ficticia). Un policial que parte a toda máquina con un lector atrapado en una tela de araña hasta el final.

El caso es llevado por el inspector Victor Coste y su equipo, todos unidos y confrontados a otro equipo llevado por una mujer. La confrontación de los dos equipos es muy divertida. El equipo de Coste ya ha protagonizado otros opus.
Abundan los clichés, pero no hay que olvidar que Olivier Norek fue capitán de Policía en el departamento malfamado del 93, con la tasa más alta de criminalidad de Francia. Allí hay que tener estómago y vocación para ejercer porque la policía no está bien amparada por los políticos que se concentran más en obtener votos y mandatos, a cuesta de « compromisos » locales que de defender a los habitantes.
La narración escenifica a una familia de bandidos córcegas regentada por un patriarca. El sentido de la familia es fuerte pero eso no les impide matar a sangre fría, a veces por poca cosa.

Hay mucha acción, mucha violencia, litros de adrenalina en este policial anclado en una triste realidad.
El inspector Coste está cansado. Con la parte profesional tan intensa, la vida privada se le fue al garete.
Un excelente thriller policial.
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Un thriller que no da tregua, intriga del mas alto nivel. Tengo que decir que el título del libro le queda que ni pintado, un suceso que desencadena una serie de situaciones en donde conforme se avanza en la historia, cada suceso va tomando su lugar en importancia en la historia, al final todo encaja como en un puzzle.

Este libro te atrapa desde la primera pagina y es imposible soltarlo, un desarrollo inteligente, no te da respiro un segundo.

Su protagonista Victor Coste, es realmente un gran personaje, real, se siente cercano, inteligente, moderado, un ser humano que llega a su límite de tener que ver y vivir entre tanta muerte, asesinatos y violencia día tras día, pero sin llegar a ser deprimente, me gusto mucho y espero verlo pronto en otra entrega, creo que lo que mas me gusto fue el sentimiento de cariño, camaradería, respeto y lealtad que demuestra este personaje y su equipo de trabajo.

Definitivamente me ha dejado un buen sabor de boca y seguiré de cerca a este autor.

Oliver Norek, un policía francés actualmente de licencia se ha hecho un hueco dentro de la novela negra francesa, en una entrevista que le hacen en el ABC de España el 1/02/17, el autor dice y cito:

«Cambio nombres y lugares de los hechos porque no quiero aprovecharme de las víctimas. Los casos, los acontecimientos sociales y políticos, las técnicas de investigación son fieles a la realidad».

Esto que les comento lo leí después de terminado el libro, pero no me sorprendió, se nota en el libro, su realidad, cruda y dura es lo que en cierta forma hace de este libro algo que va mas allá de ser una novela, es muy realista y en ocasiones, la realidad supera la ficción.

A los amantes del género se los recomiendo mucho.

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