Breve Antologia Del Tiempo

«¿Qué voy a hacer con este día?
No tengo ni siquiera el consuelo de ignorar
el breve porvenir de las horas que vienen.
Temo despertar mañana»

Lo mejor que he leído de poesía estas semanas está en esta antología. Waldo Leyva es simplemente increíble. Me regalaron este libro y ahora no quiero separarme de él porque todos los temas que me fascinan de la poesía están reunidos aquí. Una poesía tremendamente conversacional en la que las imágenes fluyen con calma, se suceden a modo de diálogo con el poeta, imágenes todas ellas que justifican su razón de ser en el poema. El paso del tiempo, la importancia de la memoria, la ausencia y los recuerdos, la soledad, la infancia… Es esta una poesía que presenta una visión distinta del mundo, marcada, pese a lo existencial de sus raíces, por una esperanza que impregna el vacío que deja a su paso el yo lírico.

Esta antología plantea algo curioso y diferente a lo que, por lo general, encontramos en las antologías de poesía. Los poemas no aparecen fechados ni ubicados bajo los nombres de las obras a las que pertenecen. El tiempo ocupa un importante lugar incluso en el modo en que los poemas se van hilvanando, sin necesidad de señalar su procedencia ni ajustarlos a un marco temporal concreto, a un aquí y a un ahora. Fluyen sin más, convergen de tal forma que quizá sería más conveniente hablar no de una antología, sino de un poemario como tal. Resulta asombroso el juego de espacios y tiempos que Leyva nos presenta y todo aquello que los habita pese a lo terrible de vivir. Si tenéis la oportunidad de leer a Waldo Leyva, hacedlo. No os dejará indiferentes.