Ivrea

Siguientes dos tomos de esta serie protagonizada por el pequeño Bojji y su amigo de las sombras Kage.



El tomo anterior terminó con el reino revolucionado por la llegada de Ouken y el ejército del Inframundo. Por fin Bojji alcanza a Ouken y se enfrenta a él demostrando todo lo que había aprendido en su entrenamiento, pero el poder de Bojji no sirve para acabar con un ser inmortal, puesto que, tras cualquier tipo de destrozo que le hace, Ouken vuelve a reconstruirse. Incluso Kage trata de ayudar comiéndoselo, pero tampoco sirve esa táctica y ambos quedarán malheridos sin poder hacerle frente. Tampoco Despa lo conseguirá, y los tres se encontrarán de repente en una especie de limbo entre la vida y la muerte.



Bojji y Despa observan desde lo alto como Kage se dispone a cruzar el río, puesto que al otro lado se encuentra su madre llamándole. Bojji trata de avisarle de que no lo haga porque eso implicaría que no podría regresar al mundo de los vivos, pero Kage no puede oírle, de modo que la decisión que tome dependerá 100% de él. Sorprendentemente, Miranjo aparecerá en el lado de los vivos y le dirá que si decide irse con su madre no podrá regresar, así que Kage decide volver para poder seguir ayudando a Bojji. Poco después a un lado del río encontramos a las madres de Miranjo y de Bojji, mientras que al otro lado está Miranjo; se trata de un momento importante en el que esta debe hacer frente a lo que hizo en el pasado, reflexionando también sobre su presente y cómo puede ser su futuro si sigue haciendo el mal.



De vuelta al reino vemos cómo los cuatro grandes se han reunido para hacer frente a Ouken, tratando de utilizar diversos trucos para acabar con él, pero Ouken, además de inmortal, es experto en batallas, así que sabe cómo contrarrestar todos sus ataques. Mientras sigue la pelea, las dudas de Miranjo continúan aflorando, y su espíritu, encerrado junto al alma de Daida, comienza a experimentar cambios a medida que va abriendo su corazón.



Ya queda poquito para que lleguemos al final de este arco argumental y vamos conociendo con más detalle la historia de algunos personajes relevantes como Ouken o Miranjo.

Me ha encantado. Es una colección a la cual le he cogido un cariño inmenso... Adoro todos los personajes que salen en la historia. Debería de ser una lectura obligatoria en todos los centros educativos. El dibujo es de lo mejor y el guión es una pasada.

Es una historia de confort para mí. Es la tercera vez que lo releo y no puede ser más bonito y perfecto todo. La manera en la que hablan de los problemas, Touma y Futaba enfadados echándose cumplidos, Tai hablando de la amistad sabiendo que solo quiere no perder a su amigo, es conmovedor. Siempre consigue enocionarme.