Editorial Barrett

Panza de burro es de esos libros que o lo amas o lo odias, y yo, personalmente, lo he amado profundamente. Es una novela que rompe con todas las convenciones, con un lenguaje diferente pero tremendamente adictivo. Me encanta cuando una historia logra sorprenderme, y esta lo ha logrado.

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No quiero revelar demasiado de la trama, porque lo fascinante de este libro es dejarse sorprender. Solo puedo decir que nos sumerge en la historia de dos niñas en un pueblo rural canario, singular, un lugar único, con su propio dialecto y encanto característico. A pesar de ser corto, es una historia intensa. Es dura, pero a la vez sensible. Y consigue transmitir una mezcla de emociones sorprendentes.

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Lo recomiendo a todos aquellos que estén dispuestos a dejar de lado los prejuicios, a aquellos que no les importe que la narrativa o el vocabulario sea basto, algo incómodo. Un libro para quienes buscan algo diferente, que les gusta la autenticidad y la originalidad por encima de la perfección convencional.