Kioto de Yasunari Kawabata
Chieko posó la mirada en el farol cristiano que estaba a los pies del arce. No alcanzaba a ver bien la desgastada talla iluminada por la escasa luz que le llegaba de la casa, pero de alguna manera deseó rezar. - Madre, ¿dónde nací en realidad? Shige miró a Takichiro. - Bajo los capullos de cerezos nocturnos de Gion - le dijo su padre rotundamente. |