Las alegres casadas de Windsor de William Shakespeare
SLENDER.-La tomaré por esposa a petición vuestra, señor. Si no hay mucho amor al principio, con el favor del cielo podrá disminuir cuando nos conozcamos mejor después de casados y que haya habido ocasión de conocerse el uno al otro. Espero que con la familiaridad crecerá el menosprecio; pero si decís «casaos con ella», con ella me caso. A eso estoy disuelto disolutamente. EVANS-Muy juiciosa respuesta... |