La feria de las vanidades de William Makepeace Thackeray
¡Ah, Feria de las Vanidades, Feria de las Vanidades! De no ser por ti podría haber sido una mujer alegre: Peter Butt y Rose, feliz pareja en una granja cómoda, con calor de familia y una serie de placeres honestos, ocupaciones, esperanzas, luchas por la vida; pero en la Feria de las Vanidades un título y una carroza de cuatro caballos son regalos más preciosos que la felicidad; y si Enrique VIII o Barba Azul viviesen hoy y deseasen una décima mujer, no dudéis que obtendrían la muchacha más bella que hiciese su presentación en sociedad durante esa temporada.
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