Varios autores

no muere el que no nace
amor  ese se queda siempre
al alba  a la sena de la luna (…).

Sara Torres, El ritual del baño

Esto [la tecnología] que pudiera parecer que les facilita la vida, les ha creado una dependencia enfermiza a los complementos tecnológicos, una falta total de autonomía y una profunda insatisfacción personal.
Como consecuencia, el individualismo es absoluto; los unos son inaccesibles a los otros. Envuelto en un durísimo caparazón, el ser humano sufre de infelicidad y soledad patológicas.

Nadie debería poder robar nada aún niño. Ni siquiera un juguete. Mucho menos se debería poder robar su tiempo,su capacidad de creer a ciegas,su infancia y su significado,o lo único que les hace,al fin y al cabo,niños : la inocencia

La esperanza es un arma de doble filo; motor que alimenta nuestras fuerzas por conseguir lo imposible y una vez a nuestro alcance nos ciega con su luz y sus promesas, llevándonos a cometer actos del todo punto imprudentes e insensatos. Llevándonos a nuestra perdición.

Las relaciones no son unilaterales, así no funciona el amor.

Todos los lectores tienen algo en común: algo se transforma en ellos mientras leen. Todos se agitan y se conmueven por dentro.

Estas escritoras desean tomar parte en la construcción de la identidad americana y nacional a través de sus narraciones, manifestando un deseo de reconocerse en la voz femenina de la historia.

Si le das todo tu tiempo a una sola persona, y esta te falla... Te acabas hundiendo.

Yo no te pertenezco ni a ti ni a nadie. Y si lo que buscas de mí es toda mi atención, lo siento, pero no puede ser. La gente necesita rodearse y crear lazos con muchas personas.

Ahora que he escapado de esa vida de esclavitud, tengo por fin la oportunidad de convertirme en un ser humano completo y de llevar una vida valiosa y significativa.

La consuegra creía que las mujeres que estudiaban no sabían coser, así que se asombró de que una estudiante como Kyeonghee, que iba y venía todo el tiempo entre Seúl y Japón como si fuera un varón, fuera capaz de coserse su propia ropa.

Pero mientras Diego nos devolvía el fuego sagrado, lo dejamos encadenar en nuestra cara a plena luz del día. El sadismo es nuestro cuando lo que poco se alumbra del héroe es su humanidad manifiesta. Porque cuando se da el mínimo desajuste entre el rol adjudicado y el asumido por el héroe, la idolatría deviene en una tremenda hostilidad, como el águila que vuelve cada día a picar el vientre del revolucionario.

Cuentos feministas para un mundo nuevo

Democracia: a veces es un deporte de contacto.

Los muertos no hablan.

Ana María Matute siguió escribiendo cuentos y novelas hasta sus últimos días; así curaba su pena. Pero el dolor nunca cicatrizó, y en algunos de sus últimos relatos seguía contando terribles historias de guerra.

Cómo sería un mundo igualitario, un mundo feminista?

Matar no es algo que haya que tomarse a la ligera, como si lo pudiera hacer cualquier imbécil con dos manos y un poco de músculo. ¿Hay fuerza? Claro. ¿Habilidad? Por supuesto. Pero lo que cuenta de verdad es la intención.

Lo único que yo quería, en ese momento, era poder apagar la necesidad de matar.

Karel Capek decía que la gente quiere los belenes porque les hacen ver el mundo más humano e idílico. Pero yo los adoraba porque estaban inseparablemente unidos a la época de fiestas hermosas, cuando todo estaba perfumado y la gente era distinta. Mi padre, mi madre y todos los demás. Parecían más felices, sonreían y eran más amables. Toda la casa respiraba bienestar. Yo deseaba que aquel tiempo tan feliz transcurriera muy despacito. No quiero jactarme de ello, pero nosotros éramos pobres de verdad. Sin embargo, lo que pudo hacer mi madre con lo poco que poseíamos parecía un milagro. Nos sentíamos sumergidos sin interrupción en un permanente bienestar festivo. Y cada rincón de la calle, incluso el más vulgar, parecía vestido de fiesta en aquella época navideña. Todo era distinto, más gracioso, más hermoso. Eso sucede cuando se tiene el espíritu festivo en el corazón y no solamente escrito con letras rojas en el calendario.