La sinopsis promete más que el libro. Una historia bonita sin más que no acaba de enganchar, un quiero y no puedo de código da Vinci. Demasiadas pesquisas apenas entendibles para una lectora de a pie como yo y ritmo lento. Para colmo pretende abrirnos a lo místico y espiritual desde un claro punto de vista católico. La guinda del pastel es cuando me cambian todas las evidentes referencias al sexo a lo largo del libro por la idea del matrimonio no digo más.
|