Como el viento de otoño de Teresa Cameselle
Les habló entonces de la dedicación, aprobada y fomentada en principio por la República, aunque prohibida después por el gobierno del Partido Radical y sus socios de la CEDA. (...) Desde hacía años la Institución Libre de Enseñanza defendía la unión de sexos y sus ventajas. Puesto que niños y niñas, hombres y mujeres, están juntos en la vida, resulta absurdo empecinarse en mantenerlos separados en las aulas.
|