Los cazahuesos de Steven Erikson
—Sueña con la muerte —dijo Telorast—. Y ahora está enfadada. —¿Con nosotras? —Sí.No.Sí.No —¡Ah, ha abierto una senda! ¡Sombra! ¡Rastro sin vida que serpentea por colinas sin vida, pereceremos de hastío! ¡Espera, no nos dejes! |