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El visitante de Stephen King
Aprendí que todo adicto sabe dos cosas: debe consumir y no puede consumir nada. Ése es el nudo que uno tiene en la cabeza, ¿entiende?
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El resplandor de Stephen King
Dentro de su caparazón, sus tres habitantes iniciaron la rutina nocturna, como microbios atrapados en el intestino de un monstruo.
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La milla verde de Stephen King
Coffey me miró con sus extraños ojos inyectados en sangre, ausentes, llorosos y sin embargo serenos, como si llorar constantemente no tuviera nada de malo
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La milla verde de Stephen King
Que vamos a matar a un elegido de Dios […] ¿Qué podré decir en mi favor cuando me encuentre con el Creador y me pida explicación, qué le diré? ¿Que era mi trabajo, mi obligación?
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La milla verde de Stephen King
La gente siempre hace bromas acerca de las cosas que les asustan pero no pueden controlar
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El resplandor de Stephen King
Una vez, durante la época en que bebía, Wendy le había echado en cara que, aunque deseaba su propia destrucción, no tenía la fibra moral suficiente para respaldar su deseo de muerte. Por eso urdía modos para que otros lo destruyeran, haciéndose lentamente pedazos, él y su familia.
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Cementerio de animales de Stephen King
El fondo del corazón humano es aún más árido...El hombre siembra sólo aquello que puede. Y lo cuida.
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Misery de Stephen King
Tal vez el otro mundo es mejor que éste, para las ratas y para las personas y no es que haya gran diferencia entre unas y otras.
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El cazador de sueños de Stephen King
Los corazones son para partirse, y las decisiones para cambiarlas. Es como nos ha hecho Dios.
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El juego de Gerald de Stephen King
Jessie le lanzó una atenta mirada y observó algo terrible: Gerald lo sabía. Sabía que ella no bromeaba al decir que no quería continuar con aquel número. Gerald lo sabía, pero optaba por ignorar lo que sabía.
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Insomnia de Stephen King
Creo que los conflictos humanos corrientes casi nunca se resuelven como en la tele. En la realidad vuelven una y otra vez, empequeñeciéndose cada vez más hasta que por fin desaparecen. Aunque la verdad es que no desaparecen, sino que se secan, como charcos de barro al sol. Y casi todos dejan el mismo residuo asqueroso.
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Fin de guardia de Stephen King
Porque las cosas pueden mejorar, y si dejas que pase un tiempo, por lo general mejoran.
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¿De qué nacionalidad es Stephen King?