El visitante de Stephen King
¡Por Dios, él mismo te dijo que no fue él! ¡Te lo dijo allí tendido mientras agonizaba! ¿Qué más quieres, un telegrama en mano del arcángel san Gabriel?
|
El visitante de Stephen King
¡Por Dios, él mismo te dijo que no fue él! ¡Te lo dijo allí tendido mientras agonizaba! ¿Qué más quieres, un telegrama en mano del arcángel san Gabriel?
|