Solo un secreto de Simona Ahrnstedt
Pero ahora… Era evidente que Isobel había tenido una relación con ese médico presuntuoso. Aunque nunca se rebajaría a sentir los celos, había algo que no encajaba. Isobel estaba rígida y llevaba un rato sin decir nada. Sebastien, por el contrario, no cesaba de hablar. —Chérie, me sorprende. No es tu tipo. —Tonterías, soy el tipo de todas —dijo Alexander. |