La maldición de Hill House de Shirley Jackson
No estés tan asustada todo el tiempo- dijo, y alargó la mano para rozar la mejilla de Eleonora con un dedo -. Nunca sabemos de dónde surge nuestro coraje
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La maldición de Hill House de Shirley Jackson
No estés tan asustada todo el tiempo- dijo, y alargó la mano para rozar la mejilla de Eleonora con un dedo -. Nunca sabemos de dónde surge nuestro coraje
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