Mimi me salvó: 1 de Sergio Bero
Incluso sin querernos a nosotres mismes, por supuesto que puede haber personas que nos quieran. No es indispensable quererme para que después otras personas sigan ese rastro de afecto. Lo significativamente transformador es que queriéndome seré capaz de validar ese amor externo, seré consciente.
|