Nueve Reglas que Romper para Conquistar a un Granuja nº 1) de Sarah MacLean
-Claro que no. Porque nuestras vidas son transparentes. Podemos estar solas en una habitación, aisladas de los hombres, pero sois vosotros los propietarios de las casas en las que nos reunimos, ya que habéis estado en los sitios en los que estamos. Siempre podréis entrar y enteraros de qué hablamos, y sin embargo a nosotras nunca se nos permite saltarnos las reglas de la conveniencia, por miedo al que dirán
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