Una promesa en el fin del mundo de Sarah Lark
Helena no tiene que haber estado casada ni con un tacaño ni con un pobre diablo.
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Una promesa en el fin del mundo de Sarah Lark
Helena no tiene que haber estado casada ni con un tacaño ni con un pobre diablo.
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La estrella de la Isla Norte de Sarah Lark
El ingenio y el humor eran la clave para llegar a su corazón.
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La estrella de la Isla Norte de Sarah Lark
El caballo tocó su mejilla con sus ollares. Fue como si lo besara. Percibió su aliento cálido: olí a hierba, libertad y amor.
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La estrella de la Isla Norte de Sarah Lark
Sólo podía soportar su existencia aferrándose a sus sueños.
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La canción de los maoríes de Sarah Lark
Parecía temblar de frío. Pero ¿no acababa de decir que tenía calor?
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En el país de la nube blanca de Sarah Lark
-Querida Fleurette, en esta vida he aprendido a leer la Biblia en maorí, a ordeñar una vaca, matar pollos e incluso a amar un mulo. Puedes estar segura de que conseguiré sacar adelante...
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En el país de la nube blanca de Sarah Lark
Primero palideció un momento y luego se ruborizó. ¿Era de alegría? ¿Del susto? ¿De vergüenza? George esperaba que venciera la alegría.
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
Tan suave y frágil como la felicidad en el amor. Un soplo de viento puede llevárselo. Necesita prevención y cuidado.
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
La historia es también una cuestión de interpretación, las acciones dependen de las circunstancias, se ven determinadas por el tiempo y el lugar.
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
...como tú soy del parecer de que los periodos de tiempo se entrelazan entre sí, que la historia no pasa completamente, sino que siempre determina nuestra naturaleza y nuestra vida, en lo bueno tanto como en lo malo.
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
—No siempre es cuestión de lo que se quiere —dijo—, ¿Queremos amar? ¿Queremos que nos amen? ¿Acaso no es algo que simplemente sucede?
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
—¡A Nueva Zelanda de inmediato y a la caza del bisabuelo! ¡A eso lo llamo yo ser ambicioso! —exclamó sonriente con una voz que retumbaba—. Aunque, quién sabe... Si yo hubiese tenido alguna referencia quizá también me habría puesto a buscar al bueno de Franzo. Venía de Dalmacia, ¿no es cierto?
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
Encuentro que las historias se aprecian mejor cuando se intenta ver los lugares o los acontecimientos desde el punto de vista de las personas que los conocían en su día. Y más cuando se trata de la historia de uno mismo o la de su propia familia.
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
-Cien años atrás no se andaban con contemplaciones -observó Gundula-. Sin pensárselo demasiado, el hijo no deseado se dejaba al cuidado de otra persona. Ojos que no ven, corazón que no siente. Entonces nadie comprobaba como le iba al pequeño en la familia de acogida. -Gundula era trabajadora social y conocían bien la historia de la sentencia de niños abandonados.
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Las olas del destino de Sarah Lark
Desde que estoy contigo tengo la impresión de que toda mi vida es una gran fiesta.
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
La historia se vuelve a repetir, pero con una salvedad aquí la mujer tiene mucho coraje y lucha por sus sueños.
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
“Ella vio sus dulces ojos, leyó comprensión y preocupación en ellos. Y de repente sintió que la invadía la ternura, el deseo de proteger y ser protegida, de comprender y ser comprendida, de amar y ser amada incondicionalmente”.
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
Simplemente hay gente con la que nuestra naturaleza amable siempre fracasa.
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
Siempre encontraba emocionante ver a gente con sus mascotas.
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El secreto de la casa del río de Sarah Lark
Todavía haría más cosas con tal de volver a ver a la chica que vence al invierno que hay en mí.
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Gregorio Samsa es un ...