Aprendiz de asesino de Robin Hobb
Puedo enseñarte aunque me odies, aunque desprecies las clases. Puedo enseñarte si te aburres, si eres vago o idiota. Pero no podré enseñarte si te asusta hablar conmigo. Al menos, no cómo me gustaría. Y tampoco puedo enseñarte si decides que esto es algo que preferirías no aprender.
|