La casa de Hades de Rick Riordan
Lo prometiste, Cerebro de Alga. ¡Prometiste que no nos separaríamos! ¡Nunca jamás! —¡ Eres insufrible! —¡ Yo también te quiero! |
La casa de Hades de Rick Riordan
Lo prometiste, Cerebro de Alga. ¡Prometiste que no nos separaríamos! ¡Nunca jamás! —¡ Eres insufrible! —¡ Yo también te quiero! |
La casa de Hades de Rick Riordan
Psique estaba en lo cierto. Cupido era un monstruo. El amor era el monstruo más salvaje de todos.
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La marca de Atenea de Rick Riordan
—Por favor—dijo Percy—. Inténtalo otra vez. Se lo rogó con aquellos ojos verde mar, como una adorable cría de foca necesitada de ayuda. Piper se preguntaba cómo ganaba Annabeth una discusión con aquel chico.
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La marca de Atenea de Rick Riordan
Hubo un momento incómodo cuando los dos chicos intentaron sentarse en la misma silla a la cabecera de la mesa. De las manos de Jason saltaron chispas en sentido literal. Tras una breve y silenciosa pausa, como si los dos estuvieran pensando: «¿En serio, colega?», cedieron la silla a Annabeth y se sentaron uno enfrente del otro a ambos lados de la mesa.
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La marca de Atenea de Rick Riordan
Annabeth colocó la rodilla sobre el pecho de Percy. Le presionó la garganta con el antebrazo. Le daba igual lo que pensaran los romanos. Un nudo de ira abrasador estalló en su pecho: un tumor de preocupación y amargura con el que había estado cargando desde el otoño anterior. —Como me vuelvas a dejar—dijo, notando un picor en los ojos—, juro por todos los dioses… Percy tuvo el valor de reírse. De repente, el nudo de acaloradas emociones se derritió en el interior de Annabeth. —Me doy por avisado—dijo Percy—. Yo también te he echado de menos. |
El hijo de Neptuno de Rick Riordan
Frank rodeó la cintura de Hazel con los brazos, y ella pensó que si iba a ser su último día en la tierra, no era una mala forma de acabar.
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El hijo de Neptuno de Rick Riordan
—La guerra es un deber—continuó Marte—. La única elección real es si la aceptas y por qué luchas.
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El último héroe del Olimpo de Rick Riordan
Porque la Esperanza sobrevive mejor con el calor del hogar. Guárdamela y nunca tendré la tentación de darme por vencido.
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El hijo de Neptuno de Rick Riordan
Los hombres como tú son los que han arruinado el mundo de los mortales. La única sociedad armoniosa es la gobernada por mujeres. Somos más fuertes, más sabias… —Más humildes—dijo Percy. |
El hijo de Neptuno de Rick Riordan
El rostro de Annabeth, su cabello rubio y sus ojos grises, su forma de reírse, de abrazarlo y de darle un beso cada vez que él hacía algo ridículo. «Debe de haberme besado mucho», pensó Percy.
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El héroe perdido de Rick Riordan
Pero la belleza consiste en encontrar lo que más se ajusta a ti, lo que te queda más natural. Para ser perfecta, tienes que sentirte perfectamente contigo misma: evitar querer ser algo que no eres.
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El héroe perdido de Rick Riordan
A lo mejor la gente con dones especiales aparece cuando pasan cosas malas porque es cuando más se les necesita.
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El héroe perdido de Rick Riordan
—A veces leo, ¿vale? Solo porque Afrodita me haya reconocido no quiere decir que sea una cabeza hueca.
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El último héroe del Olimpo de Rick Riordan
El mundo se desmoronaba, pero lo único que me importaba era que ella continuara viva.
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El último héroe del Olimpo de Rick Riordan
era Annabeth. Si no podía fiarme de ella, no podía fiarme de nadie.
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¿Cuál es la nacionalidad de Rick Riordan?