Si el tiempo no existiera de Rebeka Lo
—Es como estar en medio de una tormenta, ¿no es así? —Sí, exacto. —Ten cuidado, las tormentas causan destrucción a su paso. —Se separó para mirarme—. Elige con el corazón abierto y la mente despierta. Yo seguiré aquí por si me necesitaras… —Eres mi torre —susurré. —Soy tu torre —repitió—. Pero a veces las torres caen en las tormentas. |