La dama del lago de Raymond Chandler
—El problema que tiene el cuerpo de policía —dijo casi con suavidad— es muy complicado. Se parece a la política. Exige hombres de una honradez a toda prueba, pero tiene muy poco que ofrecer a ese tipo de personas. En consecuencia, tenemos que trabajar con lo que tenemos. Y lo que tenemos es esto. —Lo sé —dije—. Siempre lo he sabido. Y no crea que me amargo la vida por ello. Buenas noches, capitán Webber. |