Los buscadores de conchas de Rosamunde Pilcher
La ausencia es el viento que apaga la pequeña vela pero reaviva las cenizas de un fuego hasta formar grandes llamas.
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Los buscadores de conchas de Rosamunde Pilcher
La ausencia es el viento que apaga la pequeña vela pero reaviva las cenizas de un fuego hasta formar grandes llamas.
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La casa vacía de Rosamunde Pilcher
Ella lo miró a los ojos y aceptó por primera vez el hecho de que la tragedia personal es solo eso . Personal . Tu propia existencia podría desmoronarse , pero eso no significa que el resto del mundo necesariamente lo supiera ,o incluso se molestara .
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Los buscadores de conchas de Rosamunde Pilcher
El mejor regalo que los padres pueden dejar a sus hijos es su propia independencia.
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El regreso de Rosamunde Pilcher
(...) Y saber que la guerra había terminado y que no había matado las cosas triviales y frívolas, las cosas divertidas que la gente hacía antes de que todo empezara. Las canciones románticas, y bailar a la luz de la luna, y estrenar un vestido (...)
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Alcoba azul: y otros relatos de Rosamunde Pilcher
A las seis y media de la mañana, Laurie despertó en un dormitorio inundado de la luz del sol que cubría su cama como una cáldia manta. La luz se reflejaba en el triple espejo del tocador y bañaba la alfombra rosa.
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Alcoba azul: y otros relatos de Rosamunde Pilcher
La noticia de la muerte de la señorita Tolliver apareció en el periódico de la mañana. Mi esposo me lo entregó por encima de la mesa del desayuno y el nombre surgió ante mis ojos desde la columna como un grito del pasado.
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Nieve en abril de Rosamunde Pilcher
Aquella misma mañana, Caroline, tendida en un lecho de brezos, sintió el calor del sol envolviéndole el cuerpo cual una capa mientras se cubría los ojos con un brazo para protegerlos de la cegadora luz. Al quedar deslumbrada, sus restantes sentidos se agudizaron. Oía el canto de los zarapitos, el distante graznido de un cuervo, el rumor del agua y el tímido suspiro de una misteriosa brisa casi imperceptible. Aspiraba la pura suavidad de la nieve, del agua clara, de la tierra mojada y de la oscura turba
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Los buscadores de conchas de Rosamunde Pilcher
El taxi, un viejo Rover que olía a humo de cigarrillos, avanzaba lentamente por la vacía carretera de campo. Era el principio de una tarde de finales de febrero, un mágico día invernal de frío penetrante y cielo sin nubes, gélido y pálido. El sol brillaba proyectando largas sombras, aunque irradiaba poco calor. Los campos arados se extendían en la lejanía.
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Nieve en abril de Rosamunde Pilcher
La vida es demasiado corta como para mirar atrás. Eso sólo sirve para salirse del camino, tropezar y probablemente caer de bruces. Yo prefiero mirar hacia delante.
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¿Con qué frase empieza esta novela?