Alejandro Magno de
Pietro Citati
Si, a la postre, algún lector me preguntara: «¿Alejandro Magno era realmente así? ¿Eran éstos, entonces, sus mitos, éstos sus arrebatos, sus pasiones, sus temores, sus delirios, sus presentimientos?», tendría que responder que nadie estará nunca en condiciones de contestar a esa pregunta. ¿Quién podría distinguir entre Alejandro, hijo de Filipo y de Olimpia, los sueños que persiguió conscientemente o sin saberlo, los sueños que los hombres de la Antigüedad y de la Edad Media trenzaron en torno a los sueños de Alejandro, y los sueños que nosotros mismos, tan semejantes a él y a la vez tan alejados, continuamos tejiendo en torno a dichos sueños?