Obras Completas de Paul Celan
EL UMBRAL DEL SUEÑO Con manos callosas me recoges los granos de la calma. Fue mi alma su cedazo, llenos están diecisiete cántaros: la ciudad donde pernoctas. Vacila la camomila en la ventana: aquí comí por la tarde del polen de su flor... ¿Acaso soportaría ella ese silencio como tú? ¿Y no son demasiado dos hermanas? Todavía voy ante la casa a buscar en la arena agua: vacío quedó el último, el cántaro decimoctavo, el de la flor de los prados. ¡Qué raro va amarilleando tu pelo! Suelto la azul guirnalda. « LA ARENA DE LAS URNAS », 1948. (Traducido del alemán por José Luis Reina Palazón) |