Malos Hábitos de Patricia Sagastizábal
-El cristianismo no goza hoy en día de gran popularidad. Es tanto el mal que el hombre es capaz de sembrar que Dios está puesto entre paréntesis. ¿Quién creería que Él no aprueba y se retuerce de pena ante tanta maldad? Las madres que pierden a sus hijos en situaciones violentas piensan que Dios se olvidó de ellas. Los seres humanos que mueren día a día por el hambre y la maldad no ven que Dios haya tratado de salvarlos. Y no hay ninguna razón que sirva para negarles lo que sienten: sienten que Dios no quiere ver ni intervenir. Al parecer, Cristo no vive en los hombres
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