El asesino de Alfas de Patricia García-Rojo
Te lo dije el día que llegaste y te lo repito ahora: si dentro de un año decido abandonarte, rogarás de rodillas que te acoja. Vives con tus sentidos constantemente contenidos, manteniendo tu corazón humano a fuerza de costumbre. Crees que luchar como un Alfa es lo único que puede aportarte haber nacido como preceptora. No tienes ni idea de nada. Cuando tengas mis años y mires hacia atrás, descubrirás que has sido ridícula.
|